La presencia de México en el Sistema Interamericano se distingue por su trabajo constructivo en diversas agendas, su apego al Derecho Internacional, su respaldo a los órganos de derechos humanos, sus aportes financieros y sus liderazgos en áreas prioritarias del quehacer hemisférico.
Un ejemplo de esto último es el cumplimiento de la Convención Interamericana contra la Fabricación y el Tráfico Ilícitos de Armas de Fuego, Municiones, Explosivos y otros Materiales Relacionados (Cifta).
Una de las prioridades de nuestro país ha sido la seguridad, concebida desde la perspectiva multidimensional. Dentro de esta, el tema relativo a las armas ha sido especialmente importante. El compromiso de México en esta materia se nota particularmente en el ámbito multilateral para fortalecer instrumentos internacionales.
Destacan el Tratado sobre el Comercio de Armas (ATT), el Protocolo contra la fabricación y el tráfico ilícitos de armas de fuego, sus piezas y componentes y municiones (Protocolo de Palermo), el Programa de Acción de las Naciones Unidas sobre armas pequeñas y ligeras y la Cifta.
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En este marco, México está comprometido con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. En el objetivo 16, meta 16.4, la Agenda contempla reducir significativamente las corrientes financieras y de armas ilícitas, fortalecer la recuperación y devolución de los activos robados y luchar contra todas las formas de delincuencia organizada.
La Cifta, que fue adoptada en 1997, es el primer instrumento multilateral para atender el tráfico ilícito de armas de fuego y ha sido suscrita y ratificada por 31 Estados Miembro de la Organización de los Estados Americanos. Como instrumento vinculante establece controles y regulaciones a la fabricación y el tráfico ilícito de armas de fuego en las Américas. Esta convención interamericana también tiene como objetivo promover y facilitar la cooperación y el intercambio de información y experiencias entre los Estados Parte.
Además de esto, cuenta con una serie de provisiones que deben ser incluidas en las leyes y regulaciones nacionales sobre marcaje de armas para rastrear e identificar su origen, la importación y custodia; el establecimiento como delitos penales de la fabricación y tráfico ilícitos de armas de fuego; la gestión de armas confiscadas o expropiadas; prácticas en materia de exportación, importación y regímenes de licencias de tránsito; el fortalecimiento de los controles en los puntos de exportación, y el
establecimiento de otras medidas de seguridad, incluyendo la gestión y la seguridad de arsenales.
Entre otros logros, la Cifta ha servido como base para la elaboración de normatividad y leyes modelo en diversos temas relacionados con su aplicación.
México ejerce la Presidencia de la Conferencia de Estados Parte y la Secretaría Pro Tempore del Comité Consultivo de esta relevante convención. A propuesta de México, el 5 de abril se conmemora el Día Interamericano para Contrarrestar la Fabricación y el Tráfico Ilícitos de Armas de Fuego, que en 2021 se celebrará por tercera ocasión desde su adopción en 2019.
La fabricación y el tráfico ilícito de armas es un flagelo que causa serias consecuencias en la vida de las naciones porque facilita la operación del crimen organizado transnacional y causa la muerte a miles de personas cada año.
Es por esto que México trabaja constructivamente para el cumplimiento de la Cifta, hace un llamado a la urgente acción para lograrlo de manera eficiente y exhorta a los Estados Miembros que aún no lo han hecho, a que suscriban este instrumento interamericano y lo ratifiquen para su plena entrada en vigor en nuestro hemisferio. De esta forma, profundizaremos el principio de responsabilidad compartida que nos permita afrontar juntos uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo.
LUZ ELENA BAÑOS
REPRESENTANTE PERMANENTE DE MÉXICO ANTE LA OEA
@BANOS_ELENA
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