n vino para cada día, y una receta de cocina casera, a la mano, sencilla, de ingrediente del diario, así, para cada vino. La verdad, no puede sonar mejor. Así me lo contó Fernando, mente detrás de dos proyectazos de vino de Baja California, Lomita y Finca La Carrodilla, quien, con incansable creatividad -si no es una nueva etiqueta, es una cena temática o son válvulas de rescate y no de escape ante la crisis-, echa a andar esta cosa. Me gusta mucho.
Almanaque gastronómico de la pandemia. Todos los días de mayo, un cocinero distinto con un vino distinto, desde su casa, compartirá una receta para nosotros los entusiastas, claro, de vino y de comida, y su propuesta de etiqueta de alguna de estas dos vinícolas. Todo a consultar en redes.
La contingencia nos ha recordado la importancia de la comunión familiar cuando estamos rodeados en una mesa de la gente que más queremos. Hoy más que nunca debemos acercar el vino mexicano a las mesas de todos nosotros como acto máximo de fraternidad durante estos tiempos difíciles. Así me lo contó Fer Pérez Castro, y se me puso la piel chinita porque me gusta mucho el vino, porque adoro los proyectos de vino mexicano -y algunos de los suyos me dan tantita envidia-, y porque esas ideas pertenecen al grupo de gente "anti brazos cruzados". Acá no nos va a rescatar nadie le contaba yo a un par de amigos españoles, acá nos ponemos a trabajar el triple y nos recatamos a nosotros mismos.
Es decir, un martes cualquiera, Edgar Núñez, Guillermo González Beristáin, Roberto Alcocer, Federico López, Jonathan Gómez Luna, Sheyla Alvarado, Javier Plascencia -quiero-, Drew Deckman o Alfredo Villanueva (me urge su receta y ya pienso en el blanquito que propondrá), entre otros, participarán en el almanaque con su receta y la etiqueta para gozar la cocina y la vida.
De esas dos bodegas me he tomado muchas etiquetas, muchas veces con amigos en noches estrelladísimas, y he hasta diseñado en aquéllos parajes momentos Instagram de pisada de uvas para una fiesta muy particular.
Ya quiero una receta con Cursi, se me están antojando también las que acompañarán a las etiquetas de Así se va a las estrellas, y me da curiosidad saber quién elegirá un platillo con Espacio en Blanco, otro vino que muchos años me hizo feliz. Ya está anotado en mi calendario, total, pedir buen vino y cocinar sabroso con sabor de los amigos, es casi, antiviral.
[nota_relacionada id=1002424]POR VALENTINA ORTIZ MONASTERIO
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