El Presidente que odia a los medios de comunicación, planea lanzar uno pronto.
El discurso en vivo en que Donald Trump acusaba, sin pruebas, un supuesto fraude electoral en su contra, fue interrumpido por las cadenas ABC, NBC, CBS y MSNBC.
“Tenemos que interrumpir aquí, porque el Presidente está haciendo declaraciones falsas, incluida la idea de que ha habido una elección fraudalenta”, dijo el conductor de NBC Lester Holt.
Otros medios, como The Washington Post, llevan un contador de las mentiras que ha dicho el mandatario durante su gobierno; hasta agosto de 2020, Trump había dicho 22 mil 247 falsedades o declaraciones engañosas, un promedio de 14 por día, pero hasta un máximo de 50 en la recta final de la campaña electoral.
Durante su mandato, Trump ha calificado a los medios de comunicación como deshonestos o fabricadores de fake news, pero lo cierto es que el propio mandatario es quien ha difundido una y otra vez la idea del fraude electoral, pese a que todas las pruebas muestran lo contrario.
El pasado jueves, las autoridades electorales de Estados Unidos aseguraron que “no hay evidencia”, de votos perdidos, cambiados o de alteración en los sistemas de votación, y más allá, calificaron de “infundadas” las acusaciones de un “robo electoral”.
Aunque Trump hace de todo por entorpecer la transición con el inminente nuevo gobierno del demócrata Joe Biden, no podrá impedirlo. Pero es erróneo creer que al perder la elección el republicano está derrotado.
Trump fue superado por Biden, sí, pero aún es muy popular: obtuvo 72 millones de votos, y se mantiene como una figura altamente destacada del Partido Republicano, incluso se habla de que en los hechos él es el verdadero "dueño" del partido, por lo que es posible que en cuatro años busque de nuevo la Presidencia.
Para ello necesita respaldo mediático, y Trump está en pleno divorcio con Fox News, cadena que era su aliada y lo entrevistaba sin falta cuando quería dar su versión de temas importantes.
Hace una semana, ese canal dio como vencedor a Biden en el estado de Arizona, considerado clave, incluso antes que otros medios, lo que desató la furia del magnate inmobiliario. Tampoco ha hecho eco de las declaraciones infundadas del mandatario sobre su supuesto triunfo robado.
De acuerdo con la revista electrónica Axios, el todavía mandatario estadounidense quiere crear su propio canal de televisión por internet, el objetivo, según fuentes de la Casa Blanca, es “destrozar Fox”. Los primeros reportes señalan que se busca que el canal por internet cobre una suscripción de 5.99 dólares al mes.
Trump perdió esta elección, pero sus votantes aumentaron, tiene un banco de datos de sus seguidores, y la ley no le impide ir por la Presidencia de nuevo. No está derrotado.
Su labor, los próximos años será deslegitimar al gobierno de Biden, y ahondar la polarización que lo alimentó durante su gobierno.
POR ALEJANDRA MARTÍNEZ
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