Los mexicanos somos proclives a estar a la moda; si ésta viene del exterior, aún mejor. Si un famoso establece que el smoking se usa con tenis blancos, hay quienes los usan sin preguntar, si un fotógrafo famoso pide que todos se desnuden, increíblemente lo hacen con el fin de dejar atrás el tabú del cuerpo para participar en una “obra de arte mundial”; si una institución internacional pide que hay que andar en bicicleta desnudos, miles se unirán sin cuestionar.
El sábado 10 de junio en las ciudades de México, Morelia, Puebla y Guadalajara se realizará la World Naked Bike Ride. En su edición 2017 buscará hacer conciencia de la individualidad corporal, los derechos de peatones y ciclistas, la promoción del transporte de locomoción humana y sobre todo cuestionar el uso indiscriminado del automóvil y, por lo tanto, la desmedida utilización de combustibles fósiles.
Son muy atendibles los objetivos y mensajes de esta organización Internacional que logrará la participación de miles de ciclistas en 50 ciudades del mundo, pero en realidad ¿logran sus objetivos en todas las ciudades? ¿Es posible cumplir con el llamado de respeto al peatón y al ciclista en una Ciudad como la nuestra?, tengo mis dudas. Es ciudades europeas he visto que los ciclistas respetan sus ciclovías, las luces de semáforos; en Alemania, no pasan la luz roja, o antes que un peatón, pero lo más importante, atienden esas reglas básicas por un verdadero respeto a los demás.
En la Ciudad de México, muchos ciclistas no respetan las pocas ciclovías que hay, circulan por banquetas, jamás se detienen ante la luz roja o el paso peatonal, entran a vías rápidas, van en sentido contrario y, por si fuera poco, si alguien les dice algo la respuesta es una “mentada de madre”, un escupitajo y en casos aislados provocan daños a espejos y parabrisas; todo ello en exigencia de “un respeto”. Con la llegada del programa Ecobici en 2010 y un erróneo mensaje emitido desde la Secretaría del Medio Ambiente de que los ciclistas pueden hacer lo que les dé la gana, hoy es casi imposible que muchos de ellos se ciñan a un reglamento enfocado al respeto entre todos en materia de movilidad.
Rodar está de moda, espero que esas rodadas internacionales, aun desnudos, abonen a una mejor convivencia entre todos y que sus mensajes no se queden en el olvido.
Corazón que si siente
Datos de la Secretaria de Seguridad Pública de Guerrero revelan que en lo que va del año son ya 942 los muertos en el estado por el crimen organizado y la Policía Estatal en paro. Y mientras la familia michoacana y los tequileros se enfrentan, los uniformados exigen mejores condiciones de trabajo y la reinstalación de 176 de sus compañeros. Es claro que el Gobernador Héctor Astudillo no encuentra la solución.