Haz tu denuncia aquí

Los amarres de Anaya

OPINIÓN

·
En secreto trabaja un grupo de panistas para posicionar a su dirigente nacional, Ricardo Anaya, como candidato presidencial del partido para las elecciones del 2018, y sólo espera a que pasen las elecciones del próximo domingo para hacer su aparición pública. En ese bloque hay liderazgos locales de Acción Nacional: ex alcaldes, ex diputados locales, ex diputados federales e incluso ex senadores, coordinados todos por el coordinador de la fracción parlamentaria del albiazul en el Senado, Fernando Herrera Ávila. Fue el senador Herrera quien operó la conformación de este grupo para que Anaya amarre la candidatura y deje en el camino a Margarita Zavala. Eligió a panistas que obtuvieron cargos de elección popular por elección y no por la vía plurinominal. Es decir, militantes de tierra que conocen la estructura del partido desde sus entrañas, conocedores de que las elecciones no se ganan con declaraciones sino con infraestructura partidista y operación política entre la militancia de a pie. Esto significa, en sentido práctico, que el chico maravilla ya cuenta con la infraestructura informal y formal, pues hay que recordar que de los 300 consejeros nacionales que tiene el PAN, 208 son afines a él. Incluso en Aguascalientes, donde el gobernador Martín Orozco jala agua para el molino de Margarita Zavala, tres de los cuatro consejeros de ese estado son anayistas. Puesto así, nadie en el PAN podría evitar que Anaya se haga de la candidatura presidencial, excepto él mismo, por supuesto. *** Amarrado futuro político tienen la candidata panista al gobierno del Estado de México, Josefina Vázquez Mota, aun quedando en cuarto lugar en las elecciones del próximo domingo. Además de tener en la bolsa acceso al Senado, en 2018, vía una candidatura plurinominal, le darán dos pluris para la Cámara de Diputados, una de las cuales será para su hija María José Ocampo. Por su parte, la candidata de AMLO, Delfina Gómez, ya hasta cargos está repartiendo en la administración que todavía no gana. Pagará con la Secretaría de Gobierno la declinación del candidato del PT, Óscar González, y la Secretaría de Educación Estatal la comprometió a gente de Elba Esther Gordillo, quien se convirtió en su aliada en su afán de vengarse del peñanietismo y de Josefina Vázquez Mota. En el caso del PRI, están optimistas: creen que a la hora de votar pesarán los apellidos, las 63 giras que ha realizado el Presidente Enrique Peña a la entidad y las cien de las 125 alcaldías que gobiernan. *** EN EL VISOR: Rompió récord de audiencia en la televisión de paga la gran final del Torneo de Clausura 2017 de la Liga MX, entre Chivas y Tigres, el domingo pasado: la vieron un millón 582 mil personas por TDN y UTDN. Por cierto, en el amistoso entre las selecciones de México y Croacia, la transmisión de Televisa superó en 28% a sus competidores.   Columna anterior: La alianza que pudo ganar, pero no fue