Chalchihutes, Zacatecas.- Fuerzas federales conformadas por la Secretaría de Marina, el Ejército, Guardia Nacional, y Fiscalía General de la República realizan un operativo especial en la comunidad Carrizalillo, enclavada en el cerro del mismo nombre del municipio de Chalchihuites, al norte del estado de Zacatecas, colindante con Durango.
Mediante trabajos de inteligencia y denuncias ciudadanas, se pudo establecer que este sitio de la sierra, era utilizado por una organización criminal para la elaboración de drogas sintéticas y ahí se había establecido un laboratorio de producción industrial.
El lugar, es un predio de más de 39 hectáreas, donde se aseguraron 36 reactores, 56 tambos, 65 tinas, nueve mezcladoras, 77 tanques de gas, 209 bidones, cuatro motogeneradores, 62 condensadores, 94 quemadores y material diverso, en las áreas destinadas al almacenamiento de pre-precursores, síntesis de pre-precursores químicos, así como cristalización y secado, según refiere un comunicado del gobierno federal.
Otras dependencias, como la Secretaría de marina, también han informado mediante redes sociales sobre el operativo: “Este hito previene la producción de más de 27 toneladas de metanfetamina, equivalentes a 700 millones de dosis, mismas que no llegarán a las familias mexicanas”, publicó la cuenta @SEMAR_mx en su perfil de la red X, donde califica este operativo como: “el complejo de laboratorios clandestinos más grande de la presente administración”.
Este operativo fue coordinado en su totalidad por las autoridades federales y el gobierno de Zacatecas no fue informado del mismo, así lo confirmó en una publicación en redes sociales, Rodrigo Reyes Mugüerza, secretario general de gobierno de la entidad: “se está analizando una publicación en donde se informan sobre el aseguramiento de un laboratorio clandestino de fabricación de metanfetaminas. Sin embargo, hasta el momento esta información no ha sido corroborada por ninguna de las instituciones que integran la mesa”, se lee en el mensaje del funcionario estatal.
Para evitar la reutilización de este laboratorio, las autoridades utilizaron explosivos a fin de destruirlo y después incineraron la estructura, la droga y objetos decomisados fueron puestos a disposición de la autoridad federal competente.
Las operaciones militares continúan en la zona serrana, ya que no se descarta que los delincuentes hayan instalado complejos similares en otros puntos de esta región.
