Los platillos realizados con pollo son uno de los favoritos de las familias mexicanas. Incluso forman parte importante de platillos típicos en diversas entidades, como el mole, por ejemplo, incluso las enchiladas, las flautas o los chilaquiles, entre otras formas que existen de presentarlos.
Su precio puede variar de acuerdo a la forma y presentación en que lo compras, además del lugar. Por ejemplo, existen piezas de pollo enteras, o aquellas que ya están cortadas, no tienen pollo ni piel, y se vende en formas como milanesas, medallones, fajitas, pechugas, incluso alitas, etcétera. Suele ser una carne barata que se puede aprovechar en su totalidad, incluso los huesos, las patas, sus menudencias, etcétera.
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¿Cuál es la diferencia entre el pollo blanco y el pollo amarillo?
De acuerdo con diversos expertos y publicaciones científicas no existe ninguna diferencia nutricional entre el pollo blanco y el pollo de piel amarilla, ambos pueden ser buenos para la salud del ser humano en caso de consumo. Existen otras características que hacen que sus pieles sean de diferente color, pero el que llegue a tu mesa no te dañará de ninguna forma.
¿Entonces de qué depende el color? Existen factores como la alimentación o el tipo de raza del pollo del que hablemos. Supuestamente los pollos de carne amarilla son aquellos que llevan una dieta basada en maíz o alfalfa que se trata de pigmentos naturales.
En cuanto al pollo de piel blanca, se trata de una dieta donde hay menos pigmentos naturales. Otra de las diferencias que pudiera llegar a presentar con el pollo de piel amarilla es que esta dieta también afectará al sabor y a la textura del pollo. Supuestamente se trata de carne mucho más suave.
Cuáles son los aportes nutricionales de comer pollo
Los pollos son gallinas o gallos de entre 5 y 16 semanas que son sacrificados para el consumo humano, y tienen un peso entre 1 y 3 kilogramos. Hay diferentes procesos por lo que puedes criarlos e incluso engordarlos para después llevarlos a la mesa; existe una forma industrial, que se hace en un ambiente de granja masiva, mientras que otros son los de corral, donde se hacen en menos cantidad y se alimentan de forma orgánica.
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De acuerdo con estudios científicos, la carne comestible del pollo contiene proteínas, ácidos grasos monoinsaturados, ácidos grasos insaturados, niacina y vitamina B, siendo conformado en un 70% por agua. Otros componentes del pollo como el fósforo, por ejemplo, podrían contribuir a mantener los huesos y los dientes en buenas condiciones.