Cecilia Monzón, abogada y activista, dejó casos pendientes ante las autoridades judiciales, pero éstos no quedarán abandonados, pues las integrantes de diversos colectivos aseguraron que seguirán su camino en busca de justicia para mujeres violentadas, violencia que el fin de semana la alcanzó a ella tras recibir seis balazos que le quitaron la vida.
Lizeth Mejorada, integrante de Inmujeres Puebla, aseveró que la mayor parte de los casos que la jurista llevaba estaban relacionados con dos vertientes: alcanzar la pensión alimenticia de menores dejados en la indefensión y cuyas madres luchaban por obtener lo que por ley corresponde a sus hijos.
La segunda línea de trabajo era en apoyo de mujeres víctimas de violencia intrafamiliar, que debido a sus escasos recursos no podían acceder de manera pronta a la justicia.
Sus compañeras de activismo, como Edurne Ochoa, aseguraron que la propia Cecilia enfrentaba un juicio por pensión alimentaria contra el padre de su hijo de tres años. Además, recordó que en múltiples ocasiones Cecilia solicitó una orden de protección por sentirse amenazada, pero ésta no llegó,
En tanto, el gobierno federal reveló que fueron sicarios los que asesinaron a la activista, incluso que hay material para identificar a los responsables.
El presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó en la mañanera que el homicidio de la activista se trata de un “ajusticiamiento” de sicarios.
Al respecto, el subdirector de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía, informó que ya están en contacto con el gobernador Miguel Barbosa y el fiscal de justicia de Puebla, Gilberto Higuera, para atender el caso de homicidio.
PAL