Un presunto testigo protegido en las investigación de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, declaró ante la Fiscalía General de la República (FGR) diversos sobornos y complicidades de autoridades con el cártel Guerreros Unidos, esto de acuerdo con información emitida esta mañana en el diario Reforma.
De acuerdo al medio, el testigo clave declaró que el testigo llamado "Juan" refirió a que la nómina de Guerreros Unidos incluía a los Batallones 27 y 41 de Infantería, misma que incluía el listado de militares, a quienes pagaban de 60 mil a 120 mil pesos, dependiendo del rango, aunque señala que había un General que recibía hasta 5 millones de pesos para ser sobornados ante el actuar del cártel, incluyendo la desaparición de los estudiantes.
Al respecto, Vidulfo Rosales, defensor legal de los padres de los normalistas desaparecidos, asegura que estas presuntas declaraciones abren la oportunidad a una nueva ruta para las líneas de investigación a más de seis años de la tragedia.
Fue durante una entrevista para el noticiero "A la una" con Salvador García Soto que el defensor legal de los padres de la víctimas aseguró que ellos, basados en diversas indagaciones del inicio de la desaparición, determinaron que el Batallón de 27 infantería sabía lo que había ocurrido con los normalistas desaparecidos.
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Ellos omitieron dar información, insistimos que sabían, cómo es posible que el capitán Martínez Crespo fue por una motocicleta a las 2:00 de la mañana y cómo no se le dio asistencia a los estudiantes", aseveró para El Heraldo Radio.
Vidulfo Rosales recordó que por este motivo pedían explorar la línea de investigación con el gobierno mexicano, algo que nunca les permitieron hacer.
Lo que nosotros exigimos es que se siga profundizando, ahora sale esta información en varios diarios y esto da cuenta la necesidad de seguir explorando línea investigación a las fuerzas armadas, no decimos específicamente que el ejército, sino miembros del 27 batallón”, aseguró.
Escucha la entrevista completa AQUÍ: