México aceptó la propuesta de la Organización de Naciones Unidas (ONU) de "bajar" la entrega de dosis de la vacuna anti COVID-19 del laboratorio Pfizer para también pueda ser repartida en países pobres.
"Ahora en el mundo hay una polémica porque la ONU le ha pedido a Pfizer que baje sus entregas a los países con los que se tiene contrato, como es el caso nuestro y de países europeos, para que se disponga una cantidad de vacunas a la misma ONU.
"Que no haya acaparamiento y que la ONU ponga esas vacunas a disposición de países más pobres: nosotros estuvimos de acuerdo con eso; que nos bajen y luego nos repongan lo que nos corresponde", dijo el mandatario federal.
En su último día de gira por Michoacán y Guerrero, explicó que aún con ese plan de la ONU no cambia la estrategia de vacunación de México, porque ya se está negociando la llegada de vacunas de otros laboratorios.
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Acompañado del gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, el mandatario recordó que ya se negocia con el laboratorio chino Cansino; con los rusos -para tener la dosis Sputnik V y ya hay un compromiso con AstraZeneca.
Guerrero tendrá más dosis
Junto con el mandatario guerrenense, celebró que ya se hayan aplicado en el estado la totalidad de dosis que le correspondía y ahora se alistan con la nueva carga que llegará esta semana.
Recordó que luego de concluir la vacunación de todos los trabajadores de la salud que atienden a pacientes COVID-19 seguirán 15 millones de adultos mayores.
Vacunados, añadió, a todos los adultos mayores se podrá reducir hasta en un 80 por ciento la mortalidad por COVID-19.
En ese sentido, pidió esperar a que, por edad, les toque la aplicación de su vacuna y que no haya influyentismo ni gandallismo.
Criticó a quienes se han saltado la fila para vacunarse y puso como ejemplos casos como el del Estado de México, Coahuila y Tabasco, de los cuales se se aplicaron sanciones o se están investigando.
Por Francisco Nieto / Enviado