SECRETARÍA DE SALUD DE LA CDMX

Salud debe ser universal y gratuita: Oliva López Arellano

En entrevista con El Heraldo de México, la titular de la Secretaría de Salud de la CDMX aseguró que "el modelo neoliberal fracasó al verla como una mercancía y un negocio"

NACIONAL

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Oliva López Arellano, secretaria de Salud de la CDMX, afirmó que es terrible la pandemia del Covid-19, pero es bueno que alguien como la doctora Claudia Sheinbaum esté al frente del gobierno. Foto: CuartoscuroCréditos: Foto: Cuartoscuro

La pandemia demostró que los Servicios de Salud no deben ser subrogados al sector privado, que fracasó el modelo neoliberal de verlos como mercancía y negocio, pues tienen que ser universales y gratuitos, expuso Oliva López Arellano.

La secretaria de Salud de la Ciudad de México hizo un balance sobre la gestión de la emergencia sanitaria y del perfil de las políticas públicas aplicadas en los dos primeros años del sexenio.

Quitándose la investidura del cargo, para López Arellano, quien es experta en Medicina Social y doctora en Ciencia en Salud Pública, fue una enorme ventaja que la jefa de Gobierno sea una científica.

Claudia Sheinbaum, explicó, tiene una perspectiva política, pero que nunca pierde la dimensión técnica porque está formada en la ciencia.

Lo anterior permitió, dijo, incorporar prácticas internacionales de manera inmediata y revisar de manera exhaustiva lo que pasaba en el mundo entorno a la COVID-19.

“Voy a decir cómo lo veo como una ciudadana: qué mal que nos tocó una pandemia, pero qué bueno que nos tocó con este gobierno.

“Así, en síntesis. Y no nada más en la Ciudad de México, también, estoy convencida, québueno que nos tocó con esta Presidencia esta pandemia, porque si no, no estuviéramos enterados de los muertos, que siempre los ponen las personas más pobres”, aseguró.

En entrevista con El Heraldo de México, López Arellano defendió los pasos aplicados durante la gestión de la pandemia, pues desde el inicio definieron una ruta, que se fue modificando conforme se avanzaba en el conocimiento del virus.

Desde antes, aclaró, cuando inició el gobierno, el compromiso fue garantizar la universalidad y la gratuidad, lo cual implicó la contratación de personal y ampliación de turnos en los 210 centros de salud que abren los fines de semana y días festivos.

¿Cuánto personal se ha contratado? 

Los que transitaron de Nómina 8 (sin prestaciones) a Nómina GS (con prestaciones) fueron alrededor de seis mil trabajadores del sector. El personal son 30 mil, de los cuales siete mil tenían empleo con estas figuras más precarias.

¿Desde cuándo comenzó el fortalecimiento del sistema? 

Desde noviembre, diciembre (2019), ya había una compra de equipo que llegaría en enero–febrero. Eso, de alguna manera, permitió amortiguar la especulación que hubo con ventiladores, ya teníamos apalabrados ventiladores porque faltaban.

Ya teníamos el diagnóstico de falta de personal, de la necesidad de renovación y falta del equipo. La pandemia solo lo aceleró.

Los momentos de toma de decisión, ¿fueron los adecuados? 

Fueron los adecuados. Lo que sí es que en los primeros momentos desconocíamos muchas cosas del comportamiento del virus, de cómo se iba a presentar la enfermedad, de la velocidad de contagio.

En los primeros momentos, por ejemplo, desconocíamos que era insuficiente la sana distancia, que había que considerar los aerosoles, que había que incorporar el cubreboca.

También estábamos, en los primeros momentos, suponiendo que era una enfermedad respiratoria y se identificó que es una enfermedad multi-sistémica y tiene una enorme variedad de síntomas.

¿Ayudo que la jefa de Gobierno tuviera un corte científico?

Es mucho más fácil una conducción donde hay una jefa de Gobierno como la que afortunadamente tenemos, que tiene una perspectiva política, pero que nunca pierde la dimensión técnica porque es una científica.

Todo esto permitió que se incorporaran buenas prácticas internacionales muy tempranamente; ejemplo, el SMS Covid-19 para monitorear a las personas positivas.

¿Fluyó todo más rápido? 

Sí, porque hay una ventaja con el Gobierno de México, en la Secretaría de Salud federal, particularmente en la Subsecretaría de Prevención y Promoción de la Salud, también hay un grupo con una fortaleza técnica muy importante y esto permite una coordinación y una mirada compartida.

Si usted no hubiera estado al cargo ¿Cómo vería el manejo de la pandemia?

Yo le voy a decir cómo lo veo como una ciudadana: qué mal que nos tocó una pandemia, pero que bueno que nos tocó con este gobierno. Así, en síntesis.

Y no nada más en la Ciudad de México, también estoy convencida de que qué bueno que nos tocó con esta Presidencia, porque sino, no estuviéramos enterados los muertos, que siempre los ponen las personas más pobres.

Hay transparencia en la información y hay una decisión de incorporar la dimensión técnica para la toma de decisiones.

¿Cuál es la enseñanza deja todo esto?

Tenemos que seguir como sistema unificado de salud; es clarísimo que el debilitamiento de las instituciones públicas, que provocó toda la larga travesía neoliberal, que subrogó, que hizo de la salud de una mercancía y un negocio, debilitó a las instituciones.

Lo que necesitamos es la recuperación de la centralidad del estado en el fortalecimiento de las instituciones públicas y la garantía de derechos y eso pasa por universalizar y gratuidad.

¿Y el sector público? 

Algo muy importante es la revalorización del trabajo en el sector público, porque los neoliberales también lo deslegitimaron, diciendo que lo privado es mejor.

En la pandemia se muestra que la capacidad de enfrentar situaciones tan críticas pasa por un sector público fortalecido, por la coordinación, por las prácticas científicas y dimensión ético-política.

Gratuidad ¿incluida en la vacuna?

Gratuita y orientada a los grupos que más la requieran por su riesgo.

¿Cómo cierra este año?

Cerramos una pandemia ya de larga sata; ya tenemos casi nueve meses en esta situación difícil para todos. Hay que hacer un nuevo llamado a volver a quedarnos en casa; son épocas complejas porque culturalmente, en términos religiosos y sociales, son épocas de celebración, pero que no debemos perder lo ganado.

¿Qué aceleró la pandemia?

La importancia de la digitalización de muchos aspectos, el papel fundamental de la vigilancia epidemiológica de plataforma digital, articulado con el trabajo territorial. Eso lo debemos mantener y profundizar.

Por Manuel Durán