Carlos Joaquín González, gobernador de Quintana Roo, instruyó a todo su gabinete a mejorar y reforzar las acciones en contra del coronavirus.
Dentro de las acciones que pidió el líder local se encuentra la ejecución de más pruebas rápidas para diagnosticar este mal, la cual se suma al decreto que ya había lanzado para el uso obligatorio del cubrebocas en la entidad, tal y como se acordó en la Asamblea de Gobernadores del PAN (GOAN).
Otras de las medidas que se pedirán serán las siguientes:
- Fortalecimiento del distanciamiento físico.
- Prohibición de posadas y celebraciones con motivo de Navidad y Año Nuevo en oficinas gubernamentales.
- Recomendaciones para restringirlas en casas particulares de más de 10 personas.
- Prohibir reuniones de convivencia en centros de trabajo.
"La llegada del invierno impondrá nuevos riesgos, presiones y sufrimiento a las personas; llegará en el momento en que se registra un grave repunte de casos de Covid-19 en todo el país", dijo el gobernador de Quintana Roo al presidir ayer la presentación de la Política Común de Salud adoptada en los 9 estados gobernados por el PAN.
"Tenemos de nuevo un problema de crecimiento de casos, principalmente en la zona sur, en Chetumal", dijo este jueves a su gabinete. "Es indispensable tomar medidas fuertes de prevención y necesito de todos para hacerlo. Hay que dividir, de nuevo, al personal que trabaja con nosotros para que tengamos mayor espacio en las oficinas y todos los que puedan hacerlo hagan el trabajo desde casa, dejando solamente al personal de atención al público y de servicios".
El gobernador dijo que cada secretario o director de dependencia debe instruir a su personal para que se respeten estas medidas a fin de evitar los contagios de coronavirus.
"Requiero de todo su esfuerzo, trabajo y colaboración. Tendremos el sábado próximo, vía video, una reunión de gabinete para ver avances en esta instrucción y dar más indicaciones", indicó Carlos Joaquín.
Los gobernadores de Aguascalientes, Yucatán, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Querétaro, Quintana Roo, Tamaulipas y Baja California Sur dieron a conocer ayer la política común que implementaron para enfrentar la pandemia ante la llegada del invierno.
Por parte de la Secretaría de Salud estatal y por instrucción de Carlos Joaquín, se empezarán aplicar desde esta semana ocho mil pruebas rápidas, con el fin de reforzar la vigilancia epidemiológica.
Las pruebas consisten en la recolección de gotas de sangre por punción digital que son colocadas en un dispositivo donde en 10 minutos salen los resultados de positivo o negativo a la enfermedad.
De esa forma se ampliarán las redes de trazado de datos que ya operan en Quintana Roo a través de portales de geolocalización y ranking de colonias con más casos activos, pues las pruebas permitirán identificar oportunamente los contagios, atenderlos, rastrear contactos y aislar sospechosos.
"Esta ha sido la estrategia de los países más exitosos del mundo", señaló la GOAN.
Los mandatarios panistas precisaron que los datos nacionales son muy preocupantes: más de un millón 122 mil infectados y más de 111 mil decesos, lo que dibuja una tragedia humanitaria sin igual en la historia del país.
“Ante este panorama, los estados gobernados por el PAN tomamos la determinación de trabajar con absoluta seriedad, sustentados en el conocimiento científico, para proteger la salud de las familias”, afirmaron.
Finalmente, acordaron coordinarse para la aplicación oportuna de vacunas, aunque indicaron que el 2021 será un año de transición de la pandemia que requerirá el reforzamiento constante de medidas y protocolos para controlar a la baja los contagios mientras van aplicándose las vacunas según el plan nacional que abarca prácticamente los 12 meses.