En las últimas horas un sacerdote católico y un alcalde se sumaron a la lista mortal de víctimas por el coronavirus SARS-CoV-2, con lo que suman seis los curas fallecidos por la pandemia del Covid-19 y dos los presidentes municipales que mueren a causa del coronavirus en San Luis Potosí.
Apenas unas horas después que se diera a conocer el fallecimiento del director de la Casa de la Caridad Hogar del Migrante y titular de Cáritas, Rolando Maldonado Salas, la Arquidiócesis potosina informó del deceso en un hospital privado de la capital potosina del padre Juan Carlos Carrera Rodríguez, quien apenas en agosto festejó sus bodas de plata al cumplir 25 años de ordenación sacerdotal.
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El padre Carrera durante muchos años fue el párroco de la Parroquia de Santa Catarina de Alejandría, en el municipio de Rioverde, en la Zona Media de la entidad; el pasado 29 de octubre fue transferido a la parroquia de La Inmaculada Concepción de María, en la delegación municipal de La Pila, en la capital, donde al día siguiente, el viernes 30 de octubre comenzó a presentar dificultad para respirar lo que llevó a que fuera internado el miércoles 4 de noviembre donde falleció.
Por otro lado, tras varios días de permanecer internado en el Hospital central Insabi "Ignacio Morones Prieto", en la capital potosina, el presidente municipal de Santo Domingo, en el Altiplano potosino, Rubén Díaz Espinoza, falleció a causa de complicaciones derivadas por el Covid-19; el primer edil fue postulado por el PRI, pero pertenecía a la organización Antorcha Campesina y tanto el gobernador Juan Manuel Carreras López como el superdelegado del gobierno federal Gabino Morales Mendoza expresaron sus condolencias a través de redes sociales digitales.
Se trata del segundo alcalde potosino en morir a causa del Covid-19, ya que el pasado 8 de julio Josué Antonio García Rodríguez, presidente municipal postulado por el PVEM en Vanegas, también municipio del Altiplano potosino, luego de una larga agonía en un hospital de Matehuala al sr trasladado a un hospital privado de la ciudad de San Luis Potosí llegó muerto.
Por Pepe Alemán