Durante la administración del gobernador Alfredo del Mazo, las acciones para combatir al robo al transporte público en el Estado de México, han dado con la detención de casi 2 mil presuntos responsables por ese ilícito, además de que se han desmantelado 66 bandas dedicadas a llevar a cabo este tipo de ilícitos.
La Fiscalía del Estado de México, a cargo de Alejandro Gómez, informó que un total de mil 899 personas han sido detenidas y vinculadas a proceso, mientras que mil 509 personas han sido sentenciadas, todas por el flagelo antes mencionado, desde 2017 a la fecha.
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En los últimos tres años, también se han incautado 106 armas de fuego, 299 armas y asegurado 85 vehículos, detalló la Secretaría de Seguridad (SSEM), la cual en las últimas dos semanas está a cargo de Rodrigo Martínez Celis.
Hasta el momento, la Autopista México-Pachuca tiene la mayor incidencia delictiva, además de que operativos en 19 tramos carreteros de la entidad, para combatir este ilícito, en coordinación con la Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional, con patrullajes preventivos y puntos de revisión.
No son las únicas acciones
Entre otra de las acciones que la corporación lleva a cabo en las unidades de transporte se encuentran el uso de agentes vestidos de civil que abordan unidades de transporte de pasajeros, con el fin de prevenir o alertar algún ilícito o irregularidad en rutas y horarios de mayor incidencia delictiva, así como recorridos en paraderos.
La SSEM destacó las labores del permanente monitoreo en el C-5, así como al pendiente de los reportes generados por la sociedad a través de las diferentes plataformas, mapeo de zonas de mayor incidencia delictiva, así como elaborando redes de vínculos que permiten establecer las organizaciones delictivas.
Por su parte, la Secretaría de Movilidad, a cargo de Luis Gilberto Limón, destacó que se han supervisado más de 79 mil unidades de transporte público, en las diferentes modalidades de servicio, y se han retenido 12 mil 710 unidades por irregularidades en su servicio.
Esto tiene como propósito, además de evitar la irregularidad en el servicio, combatir e inhibir el robo en las unidades, el tráfico de armas y estupefacientes, que los operadores no conduzcan bajo los influjos de bebidas alcohólicas, enervantes o cualquier otra sustancia tóxica.
Por: José Ríos