En Estados Unidos, dentro de una semana, el martes 5 de noviembre, se realizarán las elecciones en las que se definirá la Presidencia, entre el republicano Donald Trump y la demócrata Kamala Harris. Del resultado de esta elecciones depende en gran medida el futuro de Estados Unidos y del mundo.
Son distintos los temas que interesan a los votantes. Sin embargo, de acuerdo con Pew Research Center, la economía es el principal tema en juego en estas elecciones. Y es que aproximadamente ocho de cada diez votantes la citan como su principal preocupación de cara a las elecciones. Sin embargo, los temas relevantes cambian entre los partidarios de Trump y Harris.
Entre los votantes del republicano, la economía (93%), la inmigración (82%) y los delitos violentos (76%) son los principales asuntos en juego. Solo el 18% de los partidarios de Trump dice que la desigualdad racial y étnica es muy importante. Y aún menos dicen que el cambio climático es muy importante (11%).
Para los partidarios de Harris, cuestiones como la atención sanitaria (76%) y los nombramientos para la Corte Suprema (73%) son de máxima importancia. Una gran mayoría también cita la economía (68%) y el aborto (67%) como cuestiones muy importantes para su voto en las elecciones. Estas son algunas de sus propuestas en temas clave.
¿Qué proponen Trump y Harris en Economía?
La economía cobra gran importancia durante las elecciones presidenciales. Kamala Harris y Donald Trump han presentado planes que, según afirman, transformarán la economía del país y abordarán las preocupaciones de los votantes. La vicepresidenta estadounidense se ha comprometido a ampliar el crédito fiscal por hijo, incluido un crédito de 6,000 dólares para los nuevos padres. También se ha comprometido a ampliar el crédito fiscal por ingresos laborales para los trabajadores de bajos ingresos que no están criando a sus hijos en casa.
Si bien Harris ha prometido que nadie que gane menos de $400,000 pagaría “un centavo” más en impuestos bajo su plan, para los estadounidenses que ganan más de un millón al año, la tasa impositiva sobre las ganancias de capital a largo plazo aumentaría del 20% al 28%.
Los recortes de impuestos introducidos por Trump en 2017 expirarán a fines del próximo año. El presidente se ha comprometido a “hacer permanentes” algunas de las medidas de la legislación, incluida una deducción estándar más alta para los contribuyentes y un aumento del crédito fiscal por hijo .
Ambos candidatos se han comprometido a eliminar los impuestos sobre las propinas. Trump también ha manifestado su apoyo a la eliminación de los impuestos sobre el pago de horas extras y ha argumentado que las personas mayores no deberían pagar impuestos sobre los beneficios de la seguridad social.
Harris se ha comprometido a pedir al Congreso que introduzca una prohibición federal a la especulación con los precios. Su administración también tomaría medidas enérgicas contra las fusiones y adquisiciones corporativas “injustas” que consolidan el poder dentro de la industria alimentaria.
Mientras tanto, Trump se ha comprometido a poner fin a las restricciones que “distorsionan el mercado” sobre el petróleo, el gas natural y el carbón, una medida que, según su campaña, reduciría los precios de los combustibles y la energía al impulsar la producción. La propuesta ha provocado críticas generalizadas de expertos y activistas climáticos.
¿Cuáles son las posturas de Trump y Harris en inmigración?
La inmigración es uno de los temas clave en las elecciones de noviembre, y muchos votantes están preocupados por la cantidad de inmigrantes que han ingresado a Estados Unidos durante el gobierno de Biden.
Los republicanos han criticado repetidamente al presidente Joe Biden y a la vicepresidenta Kamala Harris sobre el tema y han pintado una imagen de un sistema de inmigración fuera de control donde los migrantes están sobrecargando los servicios mientras posibles terroristas y criminales aprovechan el caos para infiltrarse en el país.
En comentarios públicos y en su sitio web, Harris se ha centrado en las formas en que reforzaría la seguridad fronteriza y acabaría con el contrabando de drogas.
Al principio de su mandato, Biden nombró a Harris como la persona clave de su administración para abordar las causas profundas de la migración. Los republicanos la han descrito como un puesto de “zar fronterizo” responsable de toda la seguridad fronteriza, pero su trabajo era específico: encontrar formas a largo plazo de frenar la migración desde tres países de América Central. Durante un viaje a Guatemala, advirtió a los migrantes que estaban pensando en venir a Estados Unidos: “No vengan”.
La inmigración fue el tema que impulsó a Trump a la Casa Blanca por primera vez y lo que espera le dé otro mandato. Durante casi todos sus discursos y apariciones en la campaña, ha retratado la inmigración como algo fuera de control.
Una de las promesas clave de Trump, si es reelegido, es llevar a cabo la mayor deportación en la historia de Estados Unidos. Hizo promesas similares cuando se postuló por primera vez para el cargo, pero durante su administración las deportaciones nunca superaron las 350,000.
¿Por qué el aborto es un tema clave en las elecciones de este año?
El aborto es uno de los temas que podrían determinar las decisiones de los votantes en las elecciones de noviembre, la primera contienda presidencial que se lleva a cabo desde que la Corte Suprema revocó el fallo Roe v. Wade hace dos años y allanó el camino para que 22 estados restrinjan el acceso al procedimiento.
A lo largo de la campaña, Trump ha tenido opiniones cambiantes sobre el aborto, lo que ha frustrado a los conservadores sociales y a los grupos que se oponen al derecho al aborto y que presionan para que se prohíba a nivel nacional. Trump no ha llegado a respaldar una prohibición federal del aborto. Dijo que la histórica decisión del tribunal significa que el asunto ahora queda en manos de los votantes de los estados.
Harris ha hecho del derecho al aborto un punto central de su campaña y ha trabajado para conectar las restricciones al aborto promulgadas en más de 20 estados con el candidato republicano, llamándolas "prohibiciones al aborto de Trump" en discursos durante la campaña.
En su discurso de apertura en la Convención Nacional Demócrata en la que aceptó al candidato presidencial del partido, la vicepresidenta se comprometió a convertir en ley una legislación que restablezca el derecho federal al aborto, si el Congreso aprueba dicha ley.
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