La reina Isabel murió el 8 de septiembre, causando festejos en algunas partes del mundo. Esto puede ser explicado por la forma en que Inglaterra se erigió como la potencia e imperio que es hoy. Es necesario analizar el sistema racista, explotador y opresor que se instauró en las colonias inglesas para entender el rechazo a la corona.
Una explicación del imperialismo es la necesidad de los países europeos de expandirse a nuevos mercados y de conseguir recursos naturales en una época mercantilista y de industrialización. Los efectos fueron positivos para Inglaterra, simplemente preguntémonos si sería lo mismo sin haber invadido India. Sin embargo, los efectos en la población de las colonias fueron devastadores al crear un sistema de desigualdad. Por ejemplo, en Sudáfrica, Kenia o Zimbabue, la creación de instituciones extractivistas basadas en el control y explotación de la población originaria contribuyó a la desigualdad al privarles de incentivos y oportunidades.
Sigue leyendo: La última foto de la Reina Isabel II con vida: "Estaba muy frágil, pero al mismo tiempo muy sonriente"
Otro aspecto para analizar es el sistema racista que se implementó en las colonias. La carrera imperialista de Europa coincide con la idea de que los seres vivos pueden ser clasificados jerárquicamente. Como fueron los europeos quienes llevaron a cabo dicha clasificación, basada en el color de piel, se pusieron a sí mismos en la cima de la cadena y a quienes eran más diferentes a ellos al final de ésta. Esto fue justificación para invadir naciones bajo el argumento de que las personas de color eran bárbaros y necesitaban ser reinados por su propio bien. El mejor ejemplo del racismo colonial de Inglaterra es Sudáfrica, donde hasta los años noventa vivieron bajo el apartheid, sistema de segregación que sigue teniendo efectos.
Por último, hay que mencionar la opresión y masacres coloniales. Un ejemplo es la opresión de los Mau Mau en Kenia durante los movimientos rebeldes de los años cincuenta. Por medio de mutilaciones, tortura, violaciones y ejecuciones se reprimió a los independentistas kenianos. Este intento de los ingleses por mantener el control sobre el país resultó en uno de los eventos de violencia más grandes, con 11.000 víctimas. Otros ejemplos de violencia inglesa fueron la hambruna de Orissa de 1858, la masacre de Batang Kali en 1948, la masacre de Sharpeville en 1960 y la masacre del Domingo Sangriento en Irlanda del Norte en 1972.
Todo lo que los poderes coloniales hicieron sobre las colonias influyó en su desarrollo actual. Parte de la herencia de Inglaterra es racismo, desigualdad y violencia. Razón por la cual no sorprende que la muerte de la reina fuera tomada como una buena noticia, ya que fue cómplice y parte de muchos de los abusos llevados a cabo por su país. El rechazo a la corona, la reina, los príncipes, los primeros ministros y el palacio de Buckingham nace del sufrimiento y la opresión. Lo último que queda por cuestionarnos es la propia existencia de la monarquía inglesa.
Sigue leyendo:
Guardia Nacional y violencia en México: Las sutilezas de vivir en un país que no funciona
Cuáles son los mejores ETFs para invertir, conoce sus ventajas
mgm