JAIR BOLSONARO

Colapsa Brasil por variantes de coronavirus

Hay toque de queda en Río de Janeiro y cierran comercios en Sao Paulo por repunte de casos

MUNDO

·
El Dalai Lama recibió ayer la vacuna contra el coronavirus y pidió a la población que tenga el "coraje" de hacer lo mismo. Foto: EFECréditos: Foto: EFE

Las variantes del coronavirus consideradas más transmisibles y peligrosas avanzan en Brasil y ya son predominantes en al menos un cuarto del país, que enfrenta la peor fase de la pandemia con más de mil 800 muertos diarios.

Contenedores frigoríficos para almacenar cuerpos, ambulancias transformadas en improvisadas habitaciones de hospital, traslado de pacientes a miles de kilómetros de distancia... Las señales de un colapso sanitario son cada vez más visibles en Brasil.

En los cuatro últimos días el número de fallecidos asociados al COVID-19 no ha bajado de mil 600. El viernes fueron mil 800. El miércoles se perdieron mil 910 vidas, récord absoluto en el país, según el Ministerio de Salud.

El hartazgo de la sociedad después de un año de restricciones, el negacionismo del presidente Jair Bolsonaro y la falta de medidas a nivel nacional, convierten además a Brasil en un enorme "granero" para la aparición de nuevas variantes, según especialistas.

En al menos siete de los 27 estados brasileños ya son mayoría los casos detectados con las llamadas "variantes de preocupación". Son Amazonas, Ceará, Pernambuco, Río de Janeiro, Río Grande do Sul, Santa Catarina y Paraná.

La  mutación brasileña, conocida como P.1 y originaria de Amazonas, ya está presente en casi todo el territorio nacional. Cada vez son más los indicios que apuntan a que la variante es capaz de evadir los anticuerpos generados por una persona que superó el COVID-19.

Mientras, la campaña de vacunación avanza lentamente, en medio de una gran desesperación social. Apenas ha recibido la primera dosis 3.5% de la población.

En consecuencia, cada vez son más los gobiernos regionales y municipales que han optado por endurecer las medidas sanitarias para contener el virus. Desde el viernes entró en vigor un toque de queda nocturno en la ciudad de Río de Janeiro.

Sao Paulo, el estado más rico y poblado de Brasil, inició ayer el cierre de todos los negocios, salvo los de primera necesidad, durante las próximas semanas debido al grave repunte de casos y muertes, que han puesto su sistema sanitario al borde del colapso.

 

maaz