Existen personas tan comprometidas a su labor que se niegan a dejar de trabajar a pesar de su avanzada edad. Ese es el caso de un policía en Estados Unidos, quien a sus 91 años se rehúsa a retirarse, ¡su vocación es admirable!
El nombre del oficial es LC "Buckshot" Smith, quien es agente del departamento de Camden, un pequeño poblado ubicado en el estado de Arkansas. Él obtuvo ese puesto 56 años atrás, es decir, cuando tenía apenas 35 años de edad. Inmediatamente, se enamoró de su labor y asegura que disfruta al máximo cada una de sus actividades. Por ende, no desea jubilarse, aún cuando tiene todo lo necesario para hacerlo.
De esta manera, "Buckshot", como se le apoda, es el miembro más longevo de la entidad. A la vez, es uno de los más queridos por la comunidad, pues como informa una entrevista realizada por BBC News, los habitantes de la región se detienen a saludarlo cuando se encuentran con él en las calles, demostrando así lo mucho que lo aprecian. Esto es gracias a que el agente mantiene una gran cercanía con la gente, pues, como él mismo asegura, le encanta ayudar.
El querido policía sí se retiró por una breve temporada de su labor. Lo hizo hace un tiempo para convertirse en diputado, pero sólo duró en el cargo 5 meses, ya que no le daba tanta satisfacción como ser oficial e incluso indica que se aburrió en ese lapso, debido a que no podía "cazar ni pescar".
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Para "Buckshot" la edad no es una limitante, afirma que lo más importante en esta importante labor es el compromiso y el respeto que se le dé. Sólo así se podrá lograr un beneficio en la comunidad. En un diálogo que sostuvo con CBS News declaró:
"Esta placa y esta pistola no te convierten en un oficial de policía. Tienes que querer serlo, respetar a la gente. He llevado a más gente a casa que a la cárcel"
El oficial Smith ya ha declarado que el se dejará su cargo "cuando Dios quiera".
Su historia genera esperanza en los estadounidenses, pues en un momento donde el cuerpo policial genera rechazo debido a los casos de brutalidad perpetrados por agentes, "Buckshot" demuestra que también hay oficiales buenos que se preocupan por la población.
DFC