El gobierno de Estados Unidos ya sabía que se preparaba un golpe de Estado en Argentina semanas antes de que ocurriera en 1976 y no solo eso, sabía que el gobierno militar que ocuparía el poder de la mano de Jorge Videla sería "prolongado y de una severidad sin precedentes", revelaron archivos desclasificados del país norteamericano.
El dictador Jorge Rafael Videla, declarado culpable por el asesinato y la desaparición de miles de ciudadanos, era considerado un moderado para Estados Unidos, según el director del Proyecto de Documentación del Cono Sur de la NSA, Carlos Osorio, en declaraciones para el diario argentino Página/12.
El pasado martes, un día antes del 45 aniversario del derrocamiento de Isabel Perón, el Archivo Nacional de Seguridad de Estados Unidos dio a conocer estos documentos, que también revelan que la Embajada de EU en Argentina advertía que "el gobierno militar incurrirá en violaciones de derechos humanos".
Golpistas buscaban reconocimiento de Estados Unidos
En febrero de 1976, semanas antes del golpe de Estado del 24 de marzo, un empresario argentino se reunió con el embajador de Estados Unidos en ese país sudamericano, Robert Hill, para pedirle concretar una reunión entre un militar de alto rango argentino con el entonces secretario de Estado estadounidense, Henry Kissinger.
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La idea era explicarle a Kissinger "por qué necesitaban tomar el poder y buscar garantías de pronto reconocimiento". Aunque la reunión no se concretó, Hill confirmó que el gobierno de Estados Unidos sí "reconocerá un nuevo gobierno en Argentina".
Según los documentos, el embajador Robert Hill abandonó Argentina el 17 de marzo, una semana antes del golpe, para evitar que le vincularan con el alzamiento.
"El hecho de que esté fuera del país cuando el golpe realmente suceda sería, creo, un hecho a nuestro favor que indique la no participación de la embajada y el Gobierno de los Estados Unidos".
El 24 de marzo se llevó a cabo el golpe de Estado y Jorge Videla quedó a cargo del país a través de una dictadura que llamaron "Proceso de Reorganización Nacional", el cual dejó alrededor de 30 mil desaparecidos, miles de torturados, mujeres violadas, bebés robados y centenares de presos políticos, según Carlos Osorio.
Sobre la participación de Estados Unidos en el ataque, Osorio explica que "no hay indicios que demuestren que incitaron el golpe, pero lo apoyaron, consideraban a Videla un moderado".
"El saber que tal vendaval se avecinaba salpica de responsabilidad al gobierno de Estados Unidos de la época", agregó.
CRS