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MUERE niña de 9 años tres días después de dar POSITIVO a COVID-19

Una menor falleció en su cama a causa del coronavirus, a tan solo tres días después de haber dado positivo a la enfermedad, y sin presentar complicaciones mayores

MUNDO

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La niña no había tenido más síntomas que malestar estomacal, fiebre y dolor de cabeza.Foto: APCréditos: AP

Durante los primeros meses de la pandemia del coronavirus, los médicos señalaban que el virus no era tan mortal para los niños, pues sus cuerpos parecían responder de mejor forma que los adultos. Sin embargo, ahora se han dado varios casos que demuestran lo contrario, como el de una menor que perdió la vida apenas tres días después de dar positivo.

Makenzie Góngora era una niña de 9 años que cursaba el cuarto grado en la Escuela Primaria Evelyn Scarborough, en San Antonio, Texas. Vivía con sus papás y su hermana de 8 años, y el pasado viernes 29 de enero les dijo a sus padres que se sentía un poco mal.

Sus padres la llevaron a realizar sus análisis, y salió positiva al coronavirus, pero al no presentar más síntomas complicados, la llevaron a su casa. Ahí, Makenzie falleció tres días después mientras dormía.

“Mi hermana acababa de ponerla cómoda y más tarde esa noche, ella fue a verla y notó que había fallecido mientras dormía”, declaró Victoria Southworth, su tía, a Telemundo San Antonio.

La mujer agregó que su sobrina solamente presentó diarrea, fiebre y dolor estomacal y de cabeza, e instó a otros padres a ser más cuidadosos con sus hijos.

“Como padres, nos dicen que es algo de lo que los niños se recuperan muy fácilmente”, sostuvo Southworth, haciendo énfasis en como muchos papás creen que todo va a estar bien, y es posible que las complicaciones se den sin que siquiera lo noten.

Otra muerte infantil

Otro caso similar se dio también en Texas, el pasado 25 de enero, cuando un niño falleció tan solo un día de haber sido diagnosticado con el virus del SARS-CoV-2. Su nombre era J.J Boatman, y su salud se complicó rápidamente debido a su sobrepeso.

"Por la mañana, estaba corriendo y jugando; por la noche, gritó y lloró mientras le decía a su mamá que no podía respirar. Cuando su mamá fue a verlo, su cara y sus labios ya se veían morados", aseguró su tío Gabriel Ayala, a KTVT.

Su tío destacó que apenas un mes antes J.J. había cumplido sus nueve años, y de acuerdo con los doctores del Cook Children's Medical Center, explicaron en su historia clínica que al morir sus pulmones estaban llenos de líquido, y también presentaba hipoxia generada por la falta de oxígeno.

Otra de las razones por las que los médicos han pedido prestar atención especial a los niños es que las nuevas cepas parecen afectarles mucho más que el virus original, y al ser más contagiosas pueden poner en riesgo a las familias enteras.

ACMG