El Buró Federal de Investigaciones (FBI por sus siglas en inglés) informó sobre el rescate de 33 niños en la localidad de Los Ángeles, California, quienes eran víctimas de trata. Las condiciones en las que fueron encontrados han causado indignación.
Los infantes fueron recuperados gracias a la operación llamada "Ángeles perdidos", donde se colaboró con al menos 12 agencias locales, estatales y federales, entre ellas el departamento de Policía de Los Ángeles y el departamento del Sheriff del condado, desde el pasado 11 de enero.
El operativo estuvo a cargo de la subdirectora del FBI, Kristi K. Johnson, y se dio durante el Mes de la Concientización Sobre el Tráfico de Personas, que tiene el fin de identificar, localizar y recuperar a niños perdidos, particularmente aquellos que han sido explotados sexualmente.
"De los 33 niños recuperados, ocho estaban siendo explotados sexualmente en el momento de la recuperación. Dos fueron recuperados varias veces durante la operación mientras estaban en la 'pista', un término común utilizado para describir un lugar conocido para el tráfico sexual comercial" declaró el FBI.
La operación dio inicio a múltiples investigaciones e incluso se arrestó a un presunto traficante de personas, quien enfrentará cargos estatales.
En los últimos años, el FBI ha reportado un aumento alarmante en crímenes relacionados con la trata de personas. Tan sólo en inicios del 2020 se iniciaron 664 investigaciones en todo el territorio estadounidense y se lograron 473 arrestos.
Sin embargo, para noviembre de ese mismo año, la cifra creció considerablemente, pues en ese mes se tenían 1800 investigaciones pendientes. Al día de hoy, el FBI lidera 86 grupos de trabajo sobre explotación infantil y trata de personas en todo el país
Las víctimas retornan al tráfico sexual
Los 33 infantes que fueron rescatados recibirán un tratamiento que les ayude a reintegrarse favorablemente a la sociedad. Lamentablemente, las autoridades indican que no es poco usual que las víctimas de trata vuelvan al tráfico sexual comercial, lo que responde a distintas causas: desde voluntad propia hasta fraude, coacción o son forzados por alguien más.
El FBI detalla que muchas víctimas no se identifican como tal o no reconocen que son objeto de un abuso, lo que facilita que surja este ciclo nocivo.