Santoral: este viernes 13 de noviembre la Iglesia Católica rinde homenaje a San Diego de Alcalá, religioso que se distinguió por su humildad y caridad en el cuidado de los enfermos.
En la Catedral de Alcalá de Henares, España, cada 13 de noviembre, se exponen los restos de San Diego, con motivo de la fiesta de este santo que llegó a ser patrono de los hermanos franciscanos y a realizar milagros con ayuda de la Virgen María.
Diego de Alcalá nació en San Nicolás del Puerto, Sevilla, en el año 1400, en una familia pobre. Siendo joven se decidió a vivir como ermitaño, y después fue recibido como hermano lego (no sacerdote) entre los Franciscanos Frailes Menores de la Observancia.
De acuerdo con Santopedia, en 1441 se fue como misionero a las Islas Canarias y en 1450 se trasladó a Roma, donde curó a enfermos de peste con el poder de la oración.
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La muerte de San Diego
Sus últimos días los pasó en el Convento de Santa María de Jesús de Alcalá de Henares, ciudad en la que descansan sus restos. Cuentan que al morir, el 12 de noviembre de 1463, expedía una milagrosa fragancia.
Sus restos fueron visitados por cardenales y miembros de la realeza, como Felipe II que llevó el cuerpo de San Diego al palacio, obteniendo así la curación del príncipe Carlos, quien había tenido un accidente. Fue popular entre los más humildes y el único canonizado en el siglo XVI.
Otros santos que también se recuerdan son:
- San Abón de Fleury
- San Bricio de Tours
- San Calixto Caravario
- San Dalmacio de Rodez
- San Himerio de Susingen
- San Homobono
- San Leoniano de Vienne
- San Luis Versiglia
- Santa Maxelendis de Cambrai
- San Mitrio de Aix-en-Provence
- San Nicolás I papa
- San Quinciano de Auvernia
- Beato Juan Gonga Martínez
- Beata María del Patrocinio de San Juan Giner Gomis
- Beato Varmundo de Ivrea