La Casa de los Famosos México vive sus últimos días y el fenómeno que ha causado tanto interés en televidentes y usuarios de redes sociales, está listo para concluir en lo más alto. Ante esto, la casa muestra a los integrantes del #TeamInfierno gozando cada instante, unidos más que nunca y convencidos de que el pacto que hicieron para repartir el premio de los 4 millones de pesos fue lo mejor.
Ante esto, uno de los integrantes que está asegurado para llegar a la final del domingo es Nicola Porcella, quien tiene su ticket dorado como garantía de que no saldrá este viernes en la última gala de expulsión, misma que contará con la presencia vía remota del grupo RBD.
Así, con Nicola como uno de los rivales más fuertes y que ha sido capaz de decirle sus verdades a Sergio Mayer, este también ha tenido un último sinsabor al toparse con una de las más fuertes penas que puede tener toda persona que no conoce la gastronomía mexicana: comer chile.
Nicola sufre el sabor de un chile habanero
Mientras Poncho y Wendy debatían qué harían juntos al salir de La Casa de los Famosos, se pudo ver a Nicola Porcella cerca de ellos en la cocina y el comedor, todos felices comiendo tacos de canasta. Ahí, acompañando a sus amigos y asaltando el refrigerador, el joven nacido en Perú tomó el reto de comerse unos chiles habaneros, toda vez que creyó en la palabra de Wendy y de Nigris.
Cual fue su sorpresa cuando se dio cuenta lo picosos que eran, todo porque quiso complacer a Wendy. Enchilado y con la mirada puesta en ellos, Nicola se dirigió a la llave del fregadero para beber toda el agua que le fuera posible.
"A un amigo se le reventó el intestino por comer chile habanero", dijo Wendy para asustar a Nicola mientras este lloraba y sufría.
Ante esto, él respondió:
"Necesito un beso tuyo para que se me pase", dijo Porcella ante los ascos de Wendy.
Poncho y Wendy planifican la "peda"
A la par del sufrimiento de Nicola, Wendy y Poncho recordaban la vez que el regiomontano invitó a un payasito que no sabía hacer reír. Luego de esto, hablaron que él los invitará para hacer una fiesta en su casa y Wendy pidió ser la líder de la peda, mientras que dejará que Marcela Mistral, esposa de Poncho, sea la gran dueña de todo lo demás.
Para rematar la amena charla, Poncho le indicó a Wendy que ya se sentía la dueña y señora de toda la casa, a lo cual ella le replicó: "Pues nomíname". Tras avanzar en eso con risas, de Nigris le dijo que ya no quiere lavar trastes y ella replicó que les cocina en la casa con mucho cariño.
Al final, todo fueron risas y felicidad, sólo con la ausencia de Emilio Osorio en ese momento.
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