México es un buen socio para Estados Unidos en el desarrollo de semiconductores y es un buen ejemplo de cómo las industrias se complementan, señaló Carlos Rebellon, director de Asuntos Gubernamentales para países hispanos de Intel.
“El gran reto es crear esa industria, tanto en México como en Estados Unidos, y fortalecerla, que dependa menos de Asia, es más fácil hacerlo entre los dos países”, puntualizó el directivo de la empresa que es el mayor fabricante de circuitos integrados del mundo.
En entrevista para El Heraldo de México, Rebellon dijo que el desarrollo de esta industria requiere de una estrategia integral que abarque toda la cadena de suministro, desde la investigación y desarrollo, la validación, ensamblaje y la formación de capital humano especializado.
Agregó que hace dos años se creó una iniciativa que surgió del Foro de Colaboración de Semiconductores, del cual se definió una hoja de ruta para México que se llama el Plan Maestro de semiconductores que fue retomado casi en su totalidad por el gobierno mexicano y fue incluido en el Plan México, que incluye incentivos para la llegada de más empresas e inversión para el sector.
“En México se hacen cinco de las seis etapas que se requieren para producir un chip, las obleas (materia prima básica utilizada en circuitos integrados de semiconductores) se hacen en Estados Unidos”, comentó.
En febrero, la presidenta Claudia Sheinbaum presentó el programa Kutsari que consta de un Centro de Diseño de semiconductores para 2027 con miras a proveer esta tecnología hacia 2030.
“¿Qué tan importante es un semiconductor en la vida actual? Es esencial. Nosotros siempre arrancamos diciendo que el mundo se volvió digital”, comentó Rebellon.
El experto explicó que el uso de la Inteligencia Artificial, el acceso a la Nube desde los dispositivos digitales, computadores, servidores y máquinas industriales, operan con un semiconductor adentro, de ahí su importancia.
“Los chips son los que hacen posible que estos aparatos puedan hacer las operaciones de cómputo cada vez más complejas”, puntualizó.
El directivo de Intel dijo que esta tendencia no va a cambiar, "pues los autos se están volviendo más inteligentes, al igual que las fábricas y sin ir más lejos la misma agricultura y sistemas de salud, que ahora mucho se hace con máquinas”.
Para ello, dijo, Intel contribuye con el desarrollo tecnológico a través de su centro de diseño en Guadalajara y con programas de capacitación con instituciones públicas y privadas.
Rebellon comentó que la empresa también desarrolla un proyecto llamado Acelerando la Inteligencia Artificial para México en donde se asociaron con 12 universidades y capacitan a los alumnos a que aprendan a manejar las llamadas IPC o Comunicaciones entre Procesos, que generen soluciones de inteligencia artificial para sectores industriales, una tendencia que se da desde hace algunos años el país, dijo el directivo.
Por Enrique Torres Rojas
EEZ