Mucho se habla de que es tiempo de mujeres, tanto que a algunos ya les parece desgastado el discurso. Sin embargo, cuando analizamos las estadísticas, los números y la realidad, nos damos cuenta de que aún falta mucho por cerrar la brecha de género. El Global Gender Gap Report, publicado por el World Economic Forum, estimó en 2023 que a este ritmo al que avanzamos, alcanzaremos la igualdad sustantiva hasta dentro de 131 años.
Esto no es justo no solo para las mujeres sino para las sociedades en general. Cerrar la brecha de género beneficia a todas las personas, pero también a las empresas en términos de negocio, y por lo tanto a las economías. Emparejar el piso es una responsabilidad compartida entre gobiernos, instituciones y el mundo empresarial. Para contribuir a ello, en 2018 fundamos Dalia Empower, una organización que acompaña a otras empresas a transformar su cultura en una más diversa, igualitaria e inclusiva, y al mismo tiempo, impulsa a las mujeres que buscan acceder a puestos de liderazgo a través de la educación en el desarrollo de habilidades blandas, o LifeSkills, como le llamamos nosotros. ¿Por qué habilidades de vida? De las 20 habilidades estratégicas para la competitividad que enlistan el World Economic Forum, LinkedIn y McKinsey, 15 son LifeSkills. Entre ellas destaco empatía, autoconocimiento, trabajo en equipo y adaptabilidad.
Actualmente en el mundo, por cada diez puestos directivos, solo hay un poco más de tres mujeres en ellos; y por cada cien CEOs, solo hay 6 mujeres. ¿Cómo resolvemos esto? Alzando la voz, educando, desarrollando habilidades, cambiando las culturas, fomentando políticas en las organizaciones y políticas públicas, sí, pero también sumando a nuestra lucha a los hombres que ocupan esos puestos de poder. Entre más hombres se conviertan en aliados del feminismo, más rápido avanzaremos. Y lo mismo sucede en todos los demás ámbitos en los que las mujeres estamos lidiando con el respeto a nuestros derechos y nuestras oportunidades. Durante muchos años hemos tenido que imponernos, pero creo firmemente que estamos en otro momento del movimiento, ese en el que es crítico hacernos cada vez de más aliados.
Los reconocimientos Mente Mujer Dalia Empower, que hemos instaurado este año, tienen como objetivo poner el foco sobre quienes están cambiando México desde su trinchera, y esto nos da la oportunidad, no solo de poner a individuos, empresas y organizaciones, en la conversación a través de sus esfuerzos, sino también –después de un arduo trabajo de análisis de dónde estamos, de señalar los caminos más cortos hacia la igualdad de género. Estos reconocimientos fueron pensados para seguir empujando la conversación en ámbitos más amplios y también para sumar a los hombres que tras sensibilizarse se han puesto la camiseta feminista.
Alcanzar la igualdad de género es un trabajo en equipo.
PAL
