El incendio que destruyó el pasado 10 de abril la fábrica de espejos automotrices de la empresa Mekra Lang, en Escobedo, Nuevo León, arrasó también a la industria fabricante de camiones en el país, pues la falta de proveeduría tiene parada la mayor parte de la producción.
De acuerdo con el reporte a mayo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), se fabricaron 12 mil 141 vehículos pesados, con una caída de 35 por ciento; mientras que la exportación se ubicó en nueve mil 932 unidades, un descenso de 33 por ciento; y las ventas se ubicaron en cuatro mil 242 vehículos pesados al menudeo, una caída de 8.2 por ciento, con respecto al mismo mes del año pasado.
“Los espejos son necesarios para la circulación de las unidades, y sin ellos no se pueden entregar ni comercializar las unidades”, señaló Alejandro Osorio, director de Relaciones Institucionales de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT).
La falta de proveeduría hizo que no se pudieran entregar los camiones fabricados y ello arrastró la venta al interior y exterior del país.
“El incidente se puede extender también a las cifras de junio”, dijo Guillermo Rosales, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Rosales señaló que, por segmentos, el de camiones de Carga bajó 19.85 por ciento, con 789 unidades menos y en Pasaje observó un avance de 63.12 por ciento, con 409 unidades vendidas más con respecto al mismo mes de 2023.
Osorio Carranza también justificó la caída en ventas a la creciente importación de unidades pesadas usadas.
“De enero a abril 2024 se ha observado un incremento de 157 por ciento contra 2023, con el ingreso de dos mil 754 unidades usadas” resaltó el directivo.
MAAZ