“Edificios inteligentes”, “carros autónomos”, “ciudad esponja” o “calor residual local” pueden ser términos “del futuro”, pero en Berlín son el presente. La combinación de lo real con lo digital permitirá la construcción total de una ciudad inteligente: Siemensstadt, de la empresa alemana Siemens.
En 2035 se espera que este distrito, con 73 hectáreas, albergue universidades, oficinas, transporte, hoteles, producción industrial, institutos de investigación y todo combinado entre lo digital con lo real.
Entre los distritos Charlottenburg y Spandau, en Berlín, Alemania se construye el distrito que combina la sostenibilidad y accesibilidad. Se piensa como un barrio 100 por ciento libre, para que la gente que quiera ir a pasear, estudiar, vivir e invertir.
En 1897, entre las calles de Berlín inició el proceso de este nuevo distrito, el cual sería nombrado Siemensstadt (Stadt- ciudad en alemán) en 1914 y que se ha ido desarrollando, logrando así que para 1930 ya habían trabajado 65 mil personas en este espacio.
Sobre el modelo Siemensstadt
La transformación de Siemensstadt a un barrio urbano del futuro ha comenzado con la creación de gemelo digital, es decir que antes de que inicien los trabajos físicos de construcción, todo el distrito se construye digitalmente, para conocer cómo operarlo y así optimizar los edificios y detectar problemas antes de que se presenten en el mundo real. Este gemelo digital es un planificador, el cual es creado por Siemens para diversas empresas en el mundo.
El modelo de Siemensstadt cuenta con 5 áreas, las cuales en conjunto tendrán comerciales, escuelas, hotel, producción, investigación y desarrollo, residencial, conferencia, retail, gastronomía y centro de movilidad, y se espera que tenga más de 2 mil 700 departamentos y genere más de 20 mil empleos.
De acuerdo a Siemens, estos nuevos edificios “se están planificando para cumplir con un estándar de eficiencia que está muy por encima de los requisitos reglamentarios actuales”. Además, se espera que sea una ciudad autónoma y con cero emisiones, por ejemplo, contarán con edificios totalmente eléctricos, que serán suministrados de energía por bombas de calor que extraen el calor 100 por ciento renovable del medio ambiente y fuentes geotérmicas; además, será una “ciudad esponja”, es decir capaz de almacenar el agua de la lluvia para que sea reutilizada.
En la parte de electromovilidad, tendrán estaciones de recarga en los estacionamientos, pero también tendrán pocos automóviles y una conexión directa con el metro, además de scooters y taxis autónomos. En cuanto a los “edificios inteligentes” se refiere a que tengan sensores de iluminación, conozca a las personas y sus necesidades para ajustarse a las personas.
La inversión de Siemens en este proyecto es de 600 millones de euros, los cuales son “una inversión en este futuro”, y esperan atraer a inversionistas.
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dhfm