PIENSA JOVEN

Qué son las criptomonedas y cómo están cambiando al mundo

En este artículo hacemos una revisión de la A a la Z sobre el tema de criptomonedas y bitcoins

ECONOMÍA

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criptomonedas.Créditos: Foto: Especial

Cada día, el tema de las criptomonedas y tecnologías similares se vuelve más presente en las redes sociales y los medios de comunicación. Sin embargo, el mundo del crypto, como es conocido coloquialmente, es uno complejo, que refleja la transformación digital, la desconfianza en las instituciones económicas mundiales y los conflictos políticos alrededor del mundo. 

¿Qué es una criptomoneda?

En su forma general, una criptomoneda es un “certificado” que se posee con la finalidad de intercambiarlo por un producto o servicio. La contabilidad de estos certificados se lleva a cabo mediante un libro digital, en inglés, un ledger, que registra las transacciones efectuadas por sus usuarios. El ledger es mantenido colectivamente en los sistemas de sus tenedores y cada criptomoneda tiene protocolos determinados sobre como modificarlo para garantizar su transparencia y salvaguardar los activos de los propietarios. 

Bitcoin, la criptomoneda más famosa

En octubre de 2008, un autor desconocido con el pseudónimo de Satoshi Nakamoto, descontento con la crisis económica global derivada del colapso del mercado de bienes raíces en Estados Unidos, presentó un documento que envió a un grupo de entusiastas de la criptografía sobre una propuesta sobre como generar un sistema de “efectivo digital”. En su documento detallaba el proceso mediante el cual, al encriptar y desencriptar las entradas de un ledger, sus usuarios podrían intercambiar este “efectivo digital” que Nakamoto denominó Bitcoin de forma segura. Nakamoto liberó el código de Bitcoin en enero de 2009 y ese mismo mes comenzó a operar el sistema.

En 2010 se realizó la primera transacción comercial de Bitcoin cuando se vendió una pizza de la cadena Papa John’s por 10,000 bitcoins. Así pues, a medida que tiendas digitales han implementado las transacciones de Bitcoin, se le ha otorgado un valor en dinero tradicional (fiat money) a la moneda; en 2011, un bitcoin se cotizaba en $0.30 dólares, para 2018, su valor había ascendido a $13,412.44 y, al escribir este artículo, se encontraba en $41,888.80 USD. Dado su pronunciado incremento en precio, aparte de su función como moneda de cambio digital, Bitcoin ha tomado un papel como un activo especulativo, llamando la atención de inversionistas atraídos por su rendimiento acelerado.

El éxito de Bitcoin estalló la creación de múltiples criptomonedas que buscan competir en este mercado. Ethereum ocupa el segundo puesto en el mercado de crypto y presenta algunas aplicaciones más diversas que las que ofrece Bitcoin. Por su parte, Dogecoin se ha posicionado como un chiste en el mercado, con una comunidad que impulsa su valor mediante memes y grupos en redes sociales. Como una especie de “depósito de valor” digital, la plataforma Thether se compromete a mantener el valor de sus certificados en $1.00 USD manteniendo depósitos de la moneda estadounidense en bancos tradicionales (qué tanto está afirmación se ha cumplido es disputada por grupos regulatorios).

Preocupaciones Ambientales y Regulación

Si bien cada sistema de criptomonedas opera de manera diferente, se ha llamado la atención a la dependencia de estos activos al poder computacional de sus usuarios y la ineficiencia energética que consumen. En septiembre del año pasado, el New York Times reportó que la red de Bitcoin utilizó más que siete veces la cantidad de electricidad consumida por Google durante un año. A pesar de que se estima que la mayoría de la electricidad consumida por Bitcoin es generada por fuentes renovables, es importante destacar el costo de oportunidad de utilizar este recurso.

Por otro lado, reguladores alrededor del mundo cuestionan el papel de las criptomonedas en los sistemas financieros, así como la inestabilidad que puede causar la volatilidad de los precios de estos activos en la economía. En Estados Unidos, por ejemplo, la Senadora y excandidata presidencial Elizabeth Warren instruyó a Janet Yellen, secretaria de la Tesorería de Estados Unidos a generar un sistema legal para regular los activos digitales. En China, por su parte, el año pasado se declararon todas las transacciones en criptomonedas como ilegales, citando preocupaciones ambientales y problemas en el suministro de electricidad.

El futuro de las criptomonedas

Pareciera ser un hecho indisputable que las criptomonedas llegaron para quedarse. En 2021, Ecuador reconoció a Bitcoin como una de sus monedas oficiales, y a su vez cada vez más compañías globales implementan sistemas para operar con criptomonedas mientras que el porcentaje de la población mundial que las utilizan aumenta año con año. Queda entonces preguntarse ya no sobre su supervivencia, sino sobre su valor, ¿es posible que el mercado de criptomonedas sea una burbuja a punto de explotar, o su valor se estabilizará, consolidando su función como una alternativa al dinero tradicional? 

Cabe también repetir la preocupación del tema ambiental. Aunque el número de usuarios va en aumento, la penetración de las criptomonedas es aún pequeña en la escala global y, a medida que más gente comience a utilizar estos activos, las emisiones relacionadas a estos también lo harán. ¿Podrán los desarrolladores de criptomonedas desarrollar soluciones que permitan utilizar a las criptomonedas de manera ecológicamente responsable? 

Finalmente, volviendo al origen del crypto como una forma de descentralizar el mercado monetario y restar poder a los bancos, llama la atención como los gobiernos e instituciones financieras han reaccionado al crecimiento de este mercado, ¿seguirán los países el ejemplo de China, bloqueando u obstaculizando las transacciones en criptomonedas, o imitarán a Ecuador, incentivando su uso cotidiano? ¿Podrán grupos regulatorios gobernar el espacio digital como lo han hecho con las instituciones financieras tradicionales o acaso es demasiado tarde para esto?

La respuesta a estas preguntas solo llegará con el tiempo, pues intentar contestarlas el día de hoy parece casi tan imposible como predecir el precio de un bitcoin dentro de un año. 

mgm