Las leyendas en el boxeo se hacían por sus hazañas arriba del ring, pero también por su forma de pelear. A lo largo de los años, en México y el Mundo se cuentan historias de grandes peleadores que se enfundaron los guantes y a base de golpes se ganaron el corazón de millones de personas. En esta ocasión vamos a contar la historia de un joven que logró llegar a lo más alto del boxeo, pero su gran problema fue que tenía una pegada capaz de matar a sus rivales.
La historia que vamos a contar nos remontará a la década de los 60, cuando un cubano-mexicano comenzó a hacerse de un lugar arriba del encordado con su buena técnica y sus victorias. Lo que nadie se esperaba era que su pegada fuera tan fuerte que se considerara como letal.
El boxeador del que estamos hablando es Ultiminio Ramos, un boxeador que decidió abandonar Cuba con la llegada de Fidel Castro al poder. Tras establecerse en México comenzó a mostrar sus grandes dotes en el deporte de los guantes. 'Sugar' como le conocían, tenía una pegada tan fuerte que llegó a matar a dos contrincantes arriba del ring. Ahora vamos a recordar esos dos episodios en su carrera arriba del encordado.
'Sugar' Ramos, el boxeador que vio morir a dos rivales en el ring
El 8 de noviembre de 1958, en un recinto de La Habana, Cuba, Ramos se enfundó los guantes para enfrentarse a José 'El Tigre' Blanco. Un joven que no figuraba dentro de las estrellas del boxeo de aquellos años, inclusive se podría hablar de un novato que tenía cuatro victorias en 12 peleas. A pesar de esto decidió subir al ring para intentar vencer al formidable 'Sugar'. El 'Tigre' se plantó en el encordado, pero no pudo aguantar el castigo que le propinó Ramos.
Debido a las lesiones padecidas por los golpes que le propinó Ramos, José cayó a la lona y perdió la pelea por la vía de nocaut. Lo que nadie se esperaba era que instantes después de terminar la contienda en el recinto deportivo, El 'Tigre' perdió la vida debido a la gravedad del castigo que le propinó 'Sugar' durante la contienda. Después de esto, Ultiminio siguió su carrera y con ella su llegada a México.
Fue durante su estancia en el país azteca que Ramos tuvo que enfrentarse a otro episodio como el de 1958, es decir, en el que vio morir a un rival en el ring producto de sus golpes. En esta ocasión fue en una pelea en el Dodger Stadium de Los Ángeles, California. El rival en aquella ocasión fue Davey Moore.
La pelea se realizó en Marzo de 1963. Ramos había puesto en juego los cinturones del CMB, AMB en Peso Gallo. Lo que nadie se esperaba era que durante la contienda, Moore caería a la lona y su cuello impactara sobre la primer acuerda del ring. Dos días después de la pelea, Davey falleció en un hospital en Estados Unidos debido al latigazo que sufrió el cuello en la caída durante la pelea con 'Sugar'.
A pesar de estas dos muertes, Ramos continúo con su carrera arriba del ring. Su última función fue en abril de 1972 contra Cesar Sinda en Estados Unidos. Ultiminio terminó con un récord de 55 peleas, 44 por KO, siete derrotas y cuatro empates. El pugilista cubano-mexicano perdió la vida el 3 de septiembre del 2017.
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