El jueves por la tarde, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dio a conocer su cuarto informe de Gobierno en el cual, a grandes rasgos, resaltó que la economía mexicana ha recuperado los niveles previos a la pandemia, además de señalar que las cifras de violencia disminuyeron.
Al respecto, se les preguntó a los ciudadanos de Aguascalientes de todas las edades si habían tenido la oportunidad de ver el informe, a lo que todos respondieron con un definitivo no.
“No, yo de política y eso soy muy reservado”
Señor comiendo nieve/ respuesta
“No, yo no lo vi. Nunca he visto los informes que da la verdad”
Señora con cubrebocas/ respuesta
“No, yo la verdad no soy muy adicta a eso”
Señora con un perrito/ respuesta
“No tengo idea, la verdad”
Joven/ respuesta
Estas reacciones dejan mucho de qué hablar, pues realmente la sociedad mexicana está poco interesada en los sucesos políticos que acontecen, lo cual se resume a una apatía ciudadana que cada vez invade más a la gente. Pero también hay que cuestionarnos qué está pasando, qué hay detrás de todo este desinterés; ¿será que perdimos por completo la confianza en nuestros gobernantes?, o simplemente nunca tuvimos una participación asertiva ante la política.
Sea cual sea la respuesta, debemos recordar que para que exista una buena relación y una buena comunicación entre el pueblo y sus gobernantes es necesaria la participación de ambas partes, aunque sea con el simple hecho de mantenernos informados sobre lo que acontece en nuestro país.
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