En reiteradas ocasiones, los especialistas han recomendado a la gente que, al igual que asisten con su médico de cabecera, odontólogo u oftalmólogo, es menester hacerlo con un psicólogo, pues la salud mental es igual de importante.
Aunque siempre los veamos felices y dando de brincos por sus éxitos y la fama que les rodea, los artistas no escapan de esta norma. Un claro ejemplo es Camila Cabello, quien dejó de lado los prejuicios y decidió platicar su amarga experiencia.
Durante un ensayo que escribió para WSJ, la cantante de 23 años reveló que padeció de trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) que es un trastorno de ansiedad, caracterizado por pensamientos intrusivos, recurrentes y persistentes, que producen inquietud, aprensión, temor o preocupación.
“Esto es por lo que no hay fotos del año pasado: yo llorando en el auto hablando con mi madre sobre cuánta ansiedad y cuántos síntomas de TOC estaba experimentando. Mi madre y yo en una habitación de hotel leyendo libros sobre TOC porque estaba desesperada por alivio. Experimenté lo que parecía una ansiedad constante, inquebrantable e implacable que hacía que la vida cotidiana fuera dolorosamente difícil“.
La famosa explicó que no habló de su problema por temor a decepcionar a la gente que la ve como una mujer fuerte, capaz y segura y descubrieran que se sentía débil.
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¿Cómo es que pidió ayuda?
Camila dejó de negar su sufrimiento y regañarse a sí misma, por lo que puso manos a la obra a través de la meditación y terapia cognitivo conductual.
"Durante mucho tiempo, la ansiedad parecía que me estaba robando mi humor, mi alegría, mi creatividad y mi confianza. Pero ahora la ansiedad y yo somos buenos amigos. La escucho porque sé que solo está tratando de mantenerme a salvo, pero no le presto demasiada atención. Y estoy segura que no la dejo tomar ninguna decisión"
Por Redacción Digital El Heraldo de México
lhp