Uno de los compañeros más fieles que tiene el ser humano son los perritos, el llamado "mejor amigo del hombre", el cual siempre necesita mucho amor y cariño.
Una de las prácticas más usuales que se tienen con los perros cuando salen a la calle es cargarlos, por diversas razones, para que no se ensucien, no vayan a ser lastimados por otro animal, por el hecho de cuidarlos o darles un "cariñito".
Sin embargo, esas prácticas que podrían parecer cariñosas para el perrito podrían estarle coartando parte de su crecimiento físico y psicológico.
¿Cuál es la realidad?
Los perros tienen necesidades físicas y psicológicas. La primera de ellas es que se guían por su olfato, principalmente. Al levantarlo no permites que trabaje ese sentido y por ello es una limitante incómoda para el animalito.
Por otro lado, el cuerpo del perrito debe mantenerse activo y para ello debe caminar de manera continua, por lo que lo más indicado es que cuando salgas con el a la calle, es tenerlo con una correa o dejarlo libre, pero muy pendiente de la actividad que tenga.
Todo esto depende de la educación que reciba y por ello la decisión de dejarlos libres o con la correa.
Interacción con otros perros
La interacción con otros perros también es importante para convertirlo en un ente social que pueda relacionarse con otros animales o personas sin que se sienta agredido y pueda estar en confianza.