El diseño más antiguo de relojes para hombres se renueva.
Como la gran mayoría de los relojes son redondos, es difícil pensar en otras formas que sean exitosas, sin embargo, hay algunos como el Richard Mille y el Franck Muller de caja Tonneau octagonal, además del Audemars Piget Royal Oak o el famoso Jaeger-Le Coultre rectangular.
Se puede decir que en la categoría de reloj de caja cuadrada sólo existe uno y además es un reloj con notable longevidad: El Cartier Santos.
El Santos es el reloj de pulsera en forma de serie más antiguo, incluso anterior al Cartier Tank, que acaba de cumplir 100 años.
Mientras que el Tank obtuvo un lavado de cara modesto para su centenario, incluido un modelo de acero de nivel de entrada, Santos recibió un importante y exitoso cambio de imagen en SIHH 2018.
Considerado ampliamente como el primer cronometrador diseñado desde cero como un reloj de pulsera para hombres, el Santos Dumont fue concebido por el aviador brasileño Alberto Santos-Dumont en 1906, y hecho realidad por su amigo Louis Cartier.
Mientras que el Santos estuvo en producción durante décadas, fue en su segunda encarnación en 1978 cuando se convirtió en un éxito masivo. Uno de los primeros relojes Cartier disponibles en acero y accesible. Santos ayudó a abrir la marca a un público más amplio, convirtiéndose quizás en la definición de lujo más alcanzable de la década.
Desde entonces, el Santos ha estado disponible en innumerables variaciones, cada una reflejando su época: primero, el Santos Galbée, luego el enorme Santos 100, el modelo moderno más vendido y ahora la nueva versión presentada a principios de año, El Santos 2018.
Más que un homenaje, el nuevo Santos ha logrado la rara proeza de incorporar algunos avances significativos respetando al mismo tiempo los elementos por excelencia del diseño. El Santos está disponible en dos tamaños: mediano y grande; y en cuatro metales: acero, oro amarillo, amarillo sólido y bimetálico de acero con detalles en oro de 18k.
Sólo el modelo grande tiene función de fecha y, aunque es comparable en tamaño al Santos 100, se siente un poco más pequeño y con un toque más elegante.
La diferencia más obvia es el bisel, que ya no es un cuadrado redondeado como lo era desde el principio, ahora se ha alargado para cumplir con el brazalete, asegurando una unidad más fuerte.
Mientras que los anteriores modelos equivalentes de Santos funcionaban con movimientos ETA, el nuevotrabaja con calibración automática.
Sin duda, el Santos será un éxito retomando modelos exitosos del pasado para renovarlos y realzarlos en el mercado.
[caption id="attachment_336492" align="alignnone" width="1000"] Foto: Especial[/caption]
Por FABIOLA PÉREZ RICO
Vuelve el clásico de la relojería
es El diseño más antiguo del que se tiene memoria; regresa con gran tecnología