Cuando llegó el expresidente López Obrador al gobierno, lo llamó el inicio de la cuarta transformación de México. Sus opositores incluso hicieron burla de cómo llamamos a esta etapa de cambio profundo en nuestro país.
Sin embargo, a la derecha y los opositores poco les duró el gusto; el cambio en la forma de hacer política llegó también de fondo, no se imaginaban que lo que venía era de verdad la transformación de la vida pública desde sus cimientos y que había llegado para quedarse.
Con la 4T se comenzó por erradicar la corrupción como el lastre más pesado de la administración; se hizo un cambio total en la política social que en toda la época neoliberal no se había visto; hoy se toma en cuenta quien más lo necesita, quienes menos tienen; y la política social llega a todos los rincones de México y no se queda en el camino en manos de políticos poderosos.
Pues bien, amigas y amigos, un cambio de la mayor importancia, algo que llegó a cimbrar los lazos de corrupción, nepotismo, amiguismos, compadrazgos que había en uno de los tres Poderes de la Unión, y algo que nunca había sucedido a tal manera, fue la propuesta de una verdadera reforma al Poder Judicial.
Hoy, luego de un proceso que, tenemos que decirlo, no fue nada terso y tuvo momentos de fricciones, confrontación y encono, pero donde al final, triunfó una visión de país para avanzar al futuro, tenemos la más importante reforma constitucional en materia del Poder Judicial: el pueblo, soberano como lo es, decidirá por elección universal y directa, a los integrantes de dicho Poder, así como ya lo hace al elegir a la Presidencia de México y de ahí para abajo a todas sus autoridades de representación popular.
El día de ayer, domingo 30 de marzo, ha iniciado el periodo de campaña, difusión y propaganda de los candidatos a ministras y ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, de magistradas y magistrados, y juezas y jueces. Con tres mil 422 candidatos compitiendo por 881 cargos a nivel federal y más de mil 787 en 19 estados, comienza esta nueva etapa en la historia política de México.
Sí, hoy por fin será la ciudadanía, y no una élite, quien decida quiénes estarán al frente del Poder Judicial. En nuestro país, a lo largo de su historia, la justicia era para el poderoso, los pobres y oprimidos difícilmente tenían voz; esto ha cambiado, la justicia ya no debe favorecer sólo a unos cuantos, con resoluciones tomadas con base en la corrupción, por pago de favores y en beneficio de los privilegiados de siempre. Eso se acabó.
Una vez iniciadas las campañas al Poder Judicial, los aspirantes a los diferentes cargos tendrán 60 días para darse a conocer, así como sus propuestas, y después, el 28 de mayo, iniciará la veda electoral para que el primero de junio todas y todos votemos con conciencia.
¿Cómo será la votación? Cuando llegues a tu casilla, te darán las boletas para elegir a jueces, magistrados y ministros, los candidatos estarán identificados por números, no habrá campañas financiadas por partidos y cada aspirante sólo podrá promover sus propuestas con recursos propios.
Como lo dijimos, esto es histórico porque estamos construyendo un Poder Judicial cercano a la gente, sin corrupción, sin privilegios y sin compadrazgos; ya era tiempo de un México con justicia real, una justicia para el pueblo.
Invitamos a todas y todos a informarse, escuchar y leer las propuestas, seleccionar sus candidatos y, sobre todo, que el primero de junio, acudamos a votar en las elecciones del Poder Judicial. Seamos parte de la historia. Muchas gracias, nos leemos la siguiente semana.
POR DR. SAÚL MONREAL ÁVILA
SENADOR
PAL