Los votos recibidos por Claudia Sheinbaum, fueron más que los obtenidos por Andrés Manuel López Obrador en 2018, pero sin duda, estamos en un contexto totalmente distinto, hoy después de 6 años de gobiernos de la 4T podemos decir que se consolidó un movimiento impulsado por un solo hombre, quien pasa la estafeta a la primera mujer Presidenta de México y que según un estudio de opinión presentado hace unos días por El Heraldo de México, se tienen expectativas muy altas, ya que ante la pregunta ¿Usted qué tanto espera del nuevo gobierno que encabezará la Dra. Claudia Sheinbaum?, el 64.1% respondió “mucho” y un 15.7% respondió “algo”.
El reto será que realmente se vea un cambio en la forma de gobernar y que pueda imprimir su propio sello y dinámica de trabajo, eso hace que las expectativas sean muy altas, porque además son perfiles muy distintos, Claudia Sheinbaum tiene un antecedente académico fuerte, una profesión distinta, aunque desde hace muchos años participa en política.
El primer mensaje de un gobierno distinto se vio en los perfiles que conformarán el gabinete y que han trabajado con ella en el Gobierno de la Ciudad de México, algunos perfiles técnicos y no todos políticos, tal vez hay algunos personajes que repiten en el cargo, muy enfocados a la política social, pero en materia económica y de seguridad, podremos ver que en los nombramientos hay un giro que esperemos se vean reflejados en los resultados.
El caso más claro es el de Omar García Harfuch quien había ganado la encuesta para encabezar la candidatura al Gobierno de la Ciudad de México, pero había preferencia por Clara Brugada de parte del Presidente de la República, lo que obligó a Omar a jugar el Senado, ganar y ahora pedirá licencia para incorporarse como Secretario de Seguridad a nivel federal, un nombramiento clave para la próxima Presidenta.
Otro contexto en donde se deberá ver el sello de Claudia Sheinbaum será en los retos y las herencias que le deja Andrés Manuel López Obrador, la relación con los gobernadores de oposición, la política de seguridad, la política educativa, la política energética y sobre todo las Reformas tan delicadas que están por abordarse en el Congreso de la Unión, específicamente la desaparición de Organismos Autónomos, como el INAI, además del trabajo de las leyes secundarias de la Reforma al Poder Judicial, es ahí donde se deberá marcar un antes y un después y poder influir en esas decisiones, porque tendrán un impacto directo positivo o negativo en la administración que está por comenzar.
Habrá que estar atentos al primer año de gobierno, seguramente habrá ajustes con el paso del tiempo, en cuanto a la forma de gobernar y los perfiles en el gabinete y poco a poco podremos empezar a ver diferencias entre un gobierno y otro, pero sobre todo una esencia distinta de ejercer el poder.
Sin duda, un elemento que será clave para el gobierno de Claudia Sheinbaum será la relación con Morena y su nueva dirigencia, ¿trabajarán de manera coordinada? ¿Morena será un contrapeso y un control para la Presidenta y sus decisiones? Todo ello, por el control que desde Morena se pueda ejercer en las Cámaras, no por nada van perfiles muy cercanos a AMLO al Partido, perfiles como Luisa María Alcalde o Andrés López Beltrán.
POR: JOSÉ ALFREDO CEJA RODRÍGUEZ.
ACADÉMICO UNIVERSIDAD PANAMERICANA.
@ALFREDOCEJAR
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