Cerca de Champ de Mars, en un restaurante, la madre y algunos cercanos más de Prisca Awiki observaban la final de judo en la categoría de los -63Kg. En una tablet, porque nadie fue capaz de ofrecerles un boleto para ingresar a la competencia. Ni hablar, un vuelo largo, caro y sin entrar a ver la final contra la eslovena Andreja Leski. Pero eso sí, inmediatamente después del éxito de la mexicana, la presidenta del Comité Olímpico Mexicano, María José Alcalá, y Olegario Vázquez Raña, ordenaron que ingresara a Champ de Mars, la foto con ellos siempre será importante. Políticos baratos, insensatos y dirigentes de pacotilla que tiene el deporte mexicano.
Así han sido los Olímpicos de París, pocos días, pocas medallas, pero llenos de protagonismo de la exclavadista mexicana y de su Jefe de Misión y exdirector de la Conade, Bernardo de la Garza. Parecían más preocupados en señalar a dirigentes de la actual Conade, lidereada por Ana Gabriela Guevara, que por hacer el trabajo que ellos deberían de desarrollar.
Cuando Alejandra Valencia, Ana Paula Vázquez y Ángela Ruiz ganaron la medalla de bronce en Tiro con Arco, lo primero que salió a decir la titular del Comité Olímpico Mexicano, y que nadie le preguntó por cierto, fue que era un éxito individual, no de una Federación a la cual no reconoce y que no pueden ver ni en pintura a su titular, Gabriel Ramos. Claro que no han hablado del gran fracaso que hasta ahora se consuma de los deportes acuáticos, porque evidentemente son muy cercanos a la exolímpica.
París 2024 se convirtió en un dolor de muelas para muchos medios de comunicación. Periodistas acreditados para ediciones anteriores, que habían hecho trabajos estupendos, les fueron negadas en esta ocasión. Están trabajando a la distancia, y entre el COM y Televisa, niegan hasta que los atletas puedan hablar con los medios fuera de los venues olímpicos. El no tolerar la crítica y el intentar sesgar la información, fue la misión de los jefes del COM para el otorgamiento de las credenciales de prensa. Así los periodistas que fueron a Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020 fueron rechazados, sólo por capricho de algún inepto dirigente que le lavó el cerebro a Alcalá para no dejarlos estar en las competencias. Eso sí, ahora hay influencers, tiktok teros, cómicos y no periodistas deportivos.
Esa lucha por el poder deportivo en México es patética. Los dirigentes se creen más que los atletas, y según el COM, ellos son los creadores de los niveles deportivos de los atletas, cuando la realidad es que el gobierno federal otorga importantes recursos para la preparación, solamente para Prisca Awiki se le invirtieron poco más de ocho millones de pesos, eso no lo puso De la Garza, ni lo puso Marijose Alcalá, quienes creen ser los dueños de París 2024.
POR GERARDO VELÁZQUEZ DE LEÓN
COLABORADOR
@GVLO2008
PAL