En junio de 2024, la fotógrafa chilena Macarena Peñaloza nos regaló una obra tan devastadora como necesaria: su fotolibro "Ganas de vivir, ganas de morir". Desde el título, la obra nos sumerge en un torbellino emocional que explora los recovecos de la salud mental, un tema que a menudo sigue envuelto en ta búes y estigmas sociales.
El proyecto es profundamente personal. Surge como un acto de sanación tras la pérdida del hermano menor de Peñaloza en 2019, un duelo que transformó su visión y dio forma a esta exploración visual. La autora utiliza la fotografía como herramienta para procesar su dolor, pero también como una forma de conectar con quienes, en silencio, lidian con luchas similares. En las páginas del libro, se entremezclan dibujos y cartas de su hermano, fotografías de archivo personal e imágenes originales. El resultado es un retrato íntimo y desgarrador que no solo cuenta una historia, sino que también invita al lector a cuestionar y reflexionar.
El pasado 11 de diciembre, el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM) fue sede de la presentación oficial. Fue un evento cargado de emoción, donde la autora compartió el proceso creativo y los retos de transformar su dolor en arte.
La salud mental es un tema que afecta a millones de personas en todo el mundo y sigue siendo, en muchos casos, objeto de prejuicios y malentendidos. Según la Organización Mundial de la Salud, una de cada ocho personas vive con un trastorno mental, y los niveles de apoyo y acceso a tratamientos aún son limitados en diversas regiones. Obras como "Ganas de vivir, ganas de morir" son esenciales porque contribuyen a derribar estas barreras, abriendo un espacio para el diálogo y la comprensión desde una perspectiva humana y artística.
En una sociedad donde la salud mental sigue siendo un tema relegado, "Ganas de vivir, ganas de morir" es un grito necesario. Es una invitación a dialogar sobre las realidades y mitos que rodean las enfermedades mentales, y un llamado a construir empatía. Macarena Peñaloza nos recuerda que, aunque el duelo sea individual, las conversaciones sobre salud mental deben ser colectivas.
Con "Ganas de vivir, ganas de morir", Macarena Peñaloza consolida su lugar como una de las voces más relevantes en la fotografía contemporánea. Su obra no solo busca conmover, sino también transformar. Es un recordatorio de que el arte, incluso en su forma más dolorosa, tiene el poder de sanar y unir.
POR: MELISSA MORENO
@MELISSOTOTOTA
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