Una de las inquietudes actuales más frecuentes es cómo podemos lidiar con riesgos y amenazas en un mundo tan complejo y volátil. El estudio de los riesgos y amenazas representa un medio para ayudar a la prevención de estos y proteger a las personas, evitar pérdidas económicas, así como de los activos y reputación en las organizaciones.
El factor de anticipación es muy importante, ya que minimiza los impactos y ayuda a ejercer un mejor control de daños. De acuerdo con J. De Miguel, el riesgo debe entenderse como el resultado del efecto de un fenómeno sobre lo que tiene un valor para una empresa o un gobierno. Un concepto asociado es el de resiliencia geopolítica, relacionado con la seguridad y la gestión de riesgos. Entre algunos autores relevantes se encuentran B. Buzan, que aborda cómo las dinámicas de poder y seguridad afectan los estados; N. Taleb expone cómo los sistemas geopolíticos pueden fortalecerse de la adversidad; o J. Nye que estableció el concepto de poder blando como factor para la influencia geopolítica, lo que se puede relacionar con la resiliencia.
El Institute for Strategic Risk Management (ISRM) del Reino Unido, think tank global, ayuda a profesionales a mejorar su capacidad de manejar riesgos y enfrentar crisis de manera más efectiva, a través de enfoques integradores de todas las partes involucradas (stakeholders) en el manejo de crisis.
David Rubens, Director del ISRM ha resaltado la necesidad de una coordinación inter organizacional, intercambio de información, abastecimiento de recursos y el compromiso con el caos de los responsables en estas situaciones inestables. La construcción de puentes entre la academia y otros sectores han cobrado mayor relevancia con la complejidad actual del mundo.
El manejo de riesgos y crisis nos recuerda que estas no son situaciones que aparecen en un vacío; sino el resultado de factores complejos y, muchas veces, predecibles. A través de la preparación estratégica, el liderazgo efectivo y la colaboración, las organizaciones pueden no solo superar las crisis, sino también salir fortalecidas de ellas. Algunos fenómenos de alto impacto como los desastres naturales, inundaciones, huracanes, incendios tienen cada vez mayor poder por el aumento de las temperaturas en los océanos debido al cambio climático. Una visión integradora para el manejo de crisis es imprescindible para su mitigación. En suma, necesitamos comprender que hoy se requiere poner en marcha soluciones con enfoques innovadores en un mundo complejo e interconectado. Se requiere una visión donde las organizaciones públicas, privadas, civiles y académicas establezcan sinergias para profundizar el diseño de soluciones efectivas basadas en metodologías nuevas y en evidencia fáctica.
POR MAGDALENA ALCOCER VEGA
COORDINADORA DE POSGRADO EN LA FACULTAD DE ESTUDIOS GLOBALES DE LA UNIVERSIDAD ANÁHUAC
MÉXICO Y DIRECTORA DE DESARROLLO ACADÉMICO EN EL INSTITUTE FOR STRATEGIC RISK MANAGEMENT
(ISRM). SÍGALA EN X EN @MAGDAALCOCER
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