DESDE AFUERA

Trump y Harris, Harris o Trump

Los candidatos presidenciales plantearon esta semana sus argumentos finales para consideración de los votantes, si es que queda algún indeciso

OPINIÓN

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José Carreño Figueras / Desde Afuera / Opinión El Heraldo de México
José Carreño Figueras / Desde Afuera / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

A solo unos días de la votación del 5 de noviembre, los dos principales candidatos presidenciales estadounidenses plantearon esta semana sus argumentos finales para consideración de los votantes, si es que queda algún indeciso. La diferencia fue notable, sin embargo uno, el republicano Donald Trump, fue duro y divisivo. Fue la figura central de un acto en el que uno de los oradores se refirió a Puerto Rico como una "isla de basura", otros compararon a la candidata demócrata Kamala Harris con una "prostituta" manipulada por proxenetas y la definieron como el "anticristo".

Y eso, antes de que Trump subiera al escenario y volviera a hablar del "enemigo interno" –como define a sus críticos– advirtiera contra los migrantes indocumentados  a los que ya antes se ha referido como "invasiones" o "envenenadores de la sangre" estadounidense.

El evento, con unos 20 mil asistentes que llenaron el Madison Square Garden, se convirtió en lo que The New York Times describió como “un carnaval de quejas, misoginia y racismo”.

Pero el propio diario advirtió que Trump nunca ha pagado un precio por sus excesos.

Harris, por su parte, hizo su discurso final la noche del martes, ante una multitud que algunos medios estimaron en 75 mil personas en un lugar más que simbólico: el jardín de la Elipse, en el parque central de Washington detrás de La Casa Blanca, el mismo sitio que usó Trump el 6 de enero de 2021 para dirigirse a sus seguidores antes de que se dirigieran al edificio del Capitolio en lo que a final de cuentas fue un intento de asonada que resultó en cinco muertos, decenas de heridos y más de un millar de personas sometidas a juicio.Ahí, Harris se presentó como una candidata que buscará la unidad. Trump, acusó, “llegará a La Casa Blanca con una lista de enemigos… Yo, con una lista de cosas por hacer”.

Buscó también subrayar sus credenciales como candidata de ley y orden al indicar que buscaría poner en vigencia una ley para endurecer regulaciones sobre asilo y el fortalecimiento de la frontera con México, que inicialmente fue bipartisana, pero Trump pidió que fuera bloqueada por sus aliados legislativos para no dar triunfos al gobierno demócrata.

Para muchos la opción parecería obvia, pero la elección estadounidense de 2024 se da en el marco de muchos temores, que trascienden las amenazas de violencia vertidas o sugeridas por Trump y sus seguidores, sino de miedos por el futuro de Estados Unidos.

Y en ese sentido, Trump es "el mascarón de proa", la figura representativa de las preocupaciones de millones de estadounidenses, especialmente, pero no solo de blancos anglosajones, de clase media baja, con poca educación, ante cambios demográficos y socioeconómicos que no los favorecen. Pero para otros tantos millones, en especial mujeres y de minorías étnicas y sexuales, también se ha convertido en un personaje perverso, predicador de odio y, como aseguran los demócratas, una amenaza para las instituciones democráticas estadounidenses.

POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS   

COLABORADOR    

JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM                              

@CARRENOJOSE

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