Sor Juana Inés de la Cruz expresó “¿En perseguirme, mundo, ¿qué interesas? ¿en qué te ofendo, cuando sólo intento poner bellezas en mi entendimiento y no mi entendimiento en las bellezas?” La belleza debe sobresalir de la reflexión social, del esfuerzo, de la búsqueda de la dignidad humana; no del cuerpo, no del odio, no de la burla, no de la denigración social. Desafortunadamente, todavía hoy, hay detractores contrarios el espíritu de la 4T y que se forjaron en un espíritu patriarcal. Un ejemplo claro y que ha sido condenado socialmente hace pocos días, fue el de la Senadora por el estado de Chihuahua, Andrea Chávez Treviño, a quien, mediante el uso de la inteligencia artificial (IA) se pretendió denigrar y vulnerar su imagen pública.
La inteligencia artificial es un instrumento social que debe usarse en beneficio colectivo, no para denigrar a la mujer. Las redes sociales son un medio para beneficiar la vida pública, pero de igual modo para perjudicar. Nosotras, como mujeres, debemos usarlas para eliminar cualquier tipo de violencia. Es tiempo de mujeres, y es tiempo de seguir redoblando los esfuerzos para una igualdad sustantiva, y así romper con aquellas brechas históricas que nos han invisibilizado. Si los tiempos cambian, la sociedad a su vez debe hacerlo. ¡Si una se ve afectada, nos afecta a todas!
Nadie debe dejarse intimidar por aquellas personas que solamente buscan denigrar. Más allá de lo que una normatividad establezca, somos personas, que nos encontramos a la par de cualquier ser humano. No obstante, ¿por qué se ha requerido el uso de medios jurídicos para defendernos?, para reducir la violencia sistémica que en otros tiempos fue normalizada y hasta validada. ¡Basta de callar! Como mujeres hay que unirnos, protegernos y ser solidarias. El espíritu ideológico de la 4T reafirma que el pueblo somos todas y todos, por tanto, todas aquellas voces que estén en contra de los roles denigrantes hacia la mujer, bienvenidas y bienvenidos.
A diferencia de los tiempos neoliberales, la Presidenta Claudia Sheinbaum mostró solidaridad hacia el caso de la Senadora Chávez, y se manifestó en contra de la denigración hacía la mujer. La solidaridad, es una de las palabras claves y fundamentales para seguir progresando como sociedad, y no el llamado a la violencia, que solo nos convierte, en aquello que criticamos. Las y los Legisladores pertenecientes
al espíritu de la 4T, se han mantenido firmes para disminuir todas aquellas brechas que nos hacían “desiguales”. Un esfuerzo reciente, como parte de todo lo que se ha logrado durante la 4T, fue la aprobación de los Principios de paridad e igualdad de género en el Servicio Exterior Mexicano, a fin de materializar los principios de paridad de género, igualdad y acceso a una vida libre de violencia, así como para eliminar la discriminación en el Servicio Exterior Mexicano (SEM). Estoy segura de que lograremos más cambios que como mujeres, nos beneficien. No importa el género, ni quién ejerza violencia sobre tu persona. ¡No te calles!
Todas somos el pueblo y juntas caminaremos por esta vía llena de obstáculos para generar un cambio no solamente social, sino ideológico, porque podemos lograr más allá de lo que nos proponemos, porque todas jugamos diferentes roles dentro y fuera del hogar, porque también somos hijas, esposas, madres, profesionistas, trabajadoras, pero sobre todo somos mujeres. La voz del pueblo se ha escuchado para que este acto no quede impune. Nuevamente, ¡basta de la violencia contra la mujer! Que Andrea Chávez sea un ejemplo, que inspire a otras mujeres a no quedarse en silencio, para que ese sentimiento de impotencia no quede entre cuatro paredes.
POR DIANA LÓPEZ ZURITA
COLABORADORA
PAL