ACCESO LIBRE

Jugando a la simulación

En su intento de diferenciarse de Morena, los partidos que integran la alianza “Va por México”

OPINIÓN

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Carlos Zúñiga / Acceso Libre / Opinión El Heraldo de México
Carlos Zúñiga / Acceso Libre / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: FOTO: Especial

En su intento de diferenciarse de Morena, los partidos que integran la alianza “Va por México” están llevando a la última hora la definición del proceso de selección de su candidato presidencial. Han sido días de intensas negociaciones, entre los dirigentes de organizaciones civiles y dirigentes de los partidos para llegar a un consenso.

La idea que más ha permeado es la de una elección primaria, a la que lleguen una lista “depurada” de aspirantes. Todavía no se sabe cuál será ese método de depuración, pero quizá se haga a través de una encuesta. Aunque se filtró que cada uno de los tres partidos presentaría un par de nombres como propuesta, parece que se le podrá dar cabida a más.

Se modifica el requisito de que cada aspirante juntara un millón de firmas de personas inscritas en la lista nominal para poder entrar. Esta idea que salió de la dirigencia nacional del PAN fue se cambió ahora por 250 mil firmas.

Lo más novedoso quizá es que se convocará a una especie de “elección primaria”, en la cual participarían aquellos ciudadanos que dieron su firma digital. Pero ¿quién organizará la elección y con qué dinero se pagará? Una especie de Consejo electoral ciudadano, formado por exconsejeros del IFE y del INE, que ya ha estado trabajando para la propuesta. Al ser un órgano “ciudadano” y no los partidos los que organicen este proceso, le sacarían la vuelta a la ley, ya que pretenden que sea electo entre octubre y noviembre, cuando el proceso electoral inicia de manera formal en diciembre. El dinero para organizar estas primarias saldría de las arcas de los partidos.

Parece que el anuncio del próximo lunes será un conjunto de eufemismos creados específicamente para burlar los mecanismos de fiscalización de campañas y precampañas del INE.

Sus propuestas son: un protocolo de idoneidad basado en la ONU y la OEA para impulsar un candidato, llamarlos aspirantes ciudadanos en vez de candidatos, foros ciudadanos en vez de debates, papeletas de selección en vez de boletas, además de que la elección “primaria” considera una segunda vuelta de no obtener el 50 por ciento de aprobación ciudadana.

Entonces ¿qué harán los precandidatos durante ese tiempo? Lo mismo que están haciendo las “corcholatas” de Morena, recorrer el país, hablar de los problemas que generó el gobierno de Andrés Manuel López Obrador y proponer sus soluciones. La mayoría de los aspirantes con los que platiqué en los últimos días me han dicho que están dispuestos a ir a los estados y dialogar con a sociedad, pagando de su bolsa los gastos. Su idea es “despertar el entusiasmo de la ciudadanía”.

La alianza Va por México criticó como ilegal y acto anticipado de campaña el proceso interno de Morena para la definición de la Coordinador Nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación, pero después de ver que ninguno de sus perfiles levanta, han decidido también darle vuelta a ley. Prueba de fuego para el nuevo INE.

CARLOS ZÚÑIGA PÉREZ 

COLABORADOR

@carloszup

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