MUJERES DE ACCIÓN

El discurso de odio sin limites

Las manifestaciones en contra de la ministra presidenta Norma Piña son lamentables

OPINIÓN

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Laura Esquivel Torres / Mujeres de Acción / Opinión El Heraldo de México
Laura Esquivel Torres / Mujeres de Acción / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: El Heraldo de México

De los tres poderes de la Unión, el único que preside una mujer es el Poder Judicial, una mujer a quien el presidente de la Republica, desde la tribuna mas grande e importante de México, ha violentado una y otra vez. Esa violencia política que se ha derramado sobre los peldaños sociales hasta distorsionarse en violencia digital, hoy coloca a la ministra presidenta en la cifra de las más de 9.7 millones de mujeres que han sido víctimas de ciberacoso.

El presidente de la República ha hecho declaraciones denostando su larga y destacada trayectoria, no debemos olvidar cuando dijo “la señora presidenta de la Corte, para hablar en plata, está por mí de presidenta”, las descalificaciones continuaron hasta que se convirtieron en amenazas de muerte que circularon en redes sociales en contra de la ministra. Con esto, el presidente confirma una vez mas el desprecio que tiene por las mujeres, demuestra que no le importan los niveles de violencia que, como nunca antes, se están viviendo en México, y demuestra que sigue enojado por que no logró imponer a su candidata plagiaria.

El impacto de su discurso de odio ha llegado demasiado lejos, hace unos días una mujer disfrazada con toga y birrete portando un rifle supuestamente falso, fue a la suprema corte a gritar insultos en contra de la ministra, en las puertas de la Corte y ni que decir de lo que ocurrió el pasado sábado al termino de la marcha del acarreo, un grupo de fanáticos seguidores de Morena, quemaron la imagen de la presidenta.

La violencia sigue escalando, y es que ha sido aprobada como forma de expresión desde la silla presidencial. Debemos preguntarnos qué costos podrían tener estas violencias sobre el logro histórico que ha colocado por primera vez en dos siglos, a una mujer frente al Poder Judicial de México.

Es decir, detrás del nombramiento de la ministra Piña como presidenta, hay un techo de cristal roto, una mayor representación de las mujeres en altos puestos de poder y una lucha permanente en contra de estigmas y descalificaciones hechas hacia las mujeres funcionarias en la esfera pública por el simple hecho de ser mujeres.

Con los ataques hacia la ministra Piña que incitan a la violencia, no solo peligra su integridad personal y el respeto de sus derechos humanos, también se favorece la polarización social, esa que tanto fomentan desde Palacio Nacional.

La ministra ha refrendado una y otra vez su compromiso de escuchar y trabajar permanentemente con las mujeres, porque ha entendido que, sólo escuchándonos, la Corte podrá garantizarnos acceso a la justicia. Por eso, estoy segura de que no solamente Laura Esquivel se solidariza con ella, estoy segura que todas las mujeres de México sentimos la misma indignación y las mismas ganas de seguir luchando para erradicar cualquier tipo de violencia contra la mujer, no importa si el violentador, es López Obrador. A la ministra le decimos una y otra vez ¡No está sola!

Laura Esquivel Torres

Secretaria nacional de Promoción Política de la Mujer en el CEN del PAN