COLUMNA INVITADA

Normalistas de Ayotzinapa: se empieza a hacer justicia

Este gobierno trabaja para esclarecer los hechos y no lo hace a base de torturas, ni siembra de evidencias

OPINIÓN

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Benjamín Robles Montoya / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de México
Benjamín Robles Montoya / Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

Dentro de un mes se cumplirán ocho años de uno de los episodios más negros de los gobiernos neoliberales; uno de los más emblemáticos de la negligencia gubernamental y el uso faccioso de la justicia para tergiversar y manipular. Marcado por la indolencia de un régimen que quiso lavarse las manos y aventarle la bronca a otros para, después, una vez estallado el escándalo, armar una historia a base de torturas y siembras de evidencias. Un episodio que expuso la podredumbre de las instituciones de todos los órdenes de gobierno y su colusión con la delincuencia organizada.

El informe dado a conocer por el subsecretario Alejandro Encinas confirma que la verdad histórica que el corrupto gobierno de Enrique Peña Nieto quiso imponernos en el caso de la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa no fue más que una vil y vulgar mentira construida por la entonces PGR a través de una investigación manipulada en la que esa institución, que tenía la obligación de esclarecer los hechos, sembró pruebas, ocultó información y obtuvo testimonios bajo tortura.

Se confirma también que fue un crimen de Estado, como muchos otros que el viejo régimen cometió por décadas, como Tlatelolco, el Halconazo, la Guerra Sucia, el Fobaproa, la guerra contra el narco, Nochixtlán.

Hoy la justicia sigue pendiente, pero este gobierno está trabajando para esclarecer los hechos y no lo hace a base de torturas, ni siembra de evidencias, sino superando las adversidades técnicas derivadas de la manipulación de testigos y pruebas que hizo el anterior gobierno.

La detención de Jesús Murillo Karam confirma el compromiso del gobierno de Andrés Manuel López Obrador por hacer justicia; tan es así que, como él mismo lo dijo, el caso no está cerrado, y no lo está porque aún no hay certeza de lo que pasó con los normalistas y porque Tomás Zerón de Lucio sigue libre en Israel, pero no hay duda de que este gobierno seguirá trabajando hasta tener la certeza de lo que pasó con los estudiantes y que ese delincuente, obstructor de la justicia y torturador, Tomás Zerón, rinda cuentas ante la justicia mexicana y esté en la cárcel, que es donde los delincuentes y los corruptos como él deben estar. 

Por supuesto, ya empezaron a surgir las voces que pretenden acusar una persecución política. Es comprensible, cada vez que son exhibidos en audios o videos cometiendo tropelías y corruptelas, (igual que Murillo y Tomás Zerón fueron exhibidos sembrando pruebas) no tienen cómo justificarse. Están cortados con la misma tijera.

En 2018 fuimos claros, prometimos que la 4T haría justicia en el caso de los normalistas de Ayotzinapa. No fueron palabras vacías. AMLO seguirá cumpliendo sus compromisos y en esa labor cuenta con el respaldo de quienes formamos parte de este gran proyecto transformador.

Los 43 normalistas de Ayotzinapa son una herida abierta, fresca en la memoria de las y los mexicanos. Por fin se está empezando a hacer justicia. 

POR BENJAMÍN ROBLES MONTOYA

COLABORADOR
@BENJAMINROBLESM

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