Reducir la quema de gas en nuevos yacimientos de crudo y gas asociado es uno de los retos más apremiantes que enfrenta Petróleos Mexicanos (PEMEX) al frente de Octavio Romero Oropeza.
Y es que al no existir la infraestructura necesaria para el aprovechamiento de gas, era liberado a la atmósfera. Sin embargo, esta situación comenzó a revertirse durante este año en que la petrolera enfoca parte de sus esfuerzos y recursos en terminar con esta práctica común pero poco amigable con el ambiente.
Recientemente, el presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que como parte del compromiso de México para reducir sus emisiones contaminantes, se destinaría una inversión de 2 mil millones de dólares de recursos propios y de créditos internacionales, a tasas especiales, para reducir hasta en un 98% las emisiones de gas metano en los procesos de exploración y producción.
De entrada, esta inversión ya aterrizó, pues PEMEX se encuentra instalando la infraestructura necesaria para aprovechar el gas que se extrae principalmente en el campo IXACHI ubicado en el sur de Veracruz. Esto es posible mediante el acondicionamiento de una Estación de Medición y Control (EMC) denominada Papan, y una batería de separación.
En lo referente a la EMC de Papan tendrá una capacidad para aprovechar hasta 300 millones de pies cúbicos diarios de gas húmedo amargo. En tanto que la segunda infraestructura, la batería IXACHI, va a permitir separar las fases aceite-gas-agua en los hidrocarburos provenientes de dicho campo, impulsando con ello la producción y venta de gas nacional.
Hace unas semanas, el mismo director de la petrolera dio a conocer que el volumen de la quema de gas se había reducido ya en 44% durante lo que va de este año, no obstante, buscan aprovechar este recurso hasta en 96% en el mediano plazo y hasta en 98% para el cierre de la actual administración.
Es un reto que se percibe difícil, sin embargo, las baterías de la petrolera están enfocadas en cumplir con estos compromisos con el medio ambiente, y replicar este modelo altamente sustentable en otras partes del país, al tiempo que se aprovecha e incrementa la comercialización de gas.
INAH, en falta
En el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), de Diego Prieto, continúan los problemas relacionados a la Coordinación Nacional de Recursos Materiales, y es que Ocram Seyer sigue sin ver un quinto de los 6 millones 221 mil pesos que el organismo le adeuda con relación a la limpia brindada de agosto de 2021 a febrero pasado, en instalaciones de los Museos Nacionales de Antropología e Historia, Castillo de Chapultepec y oficinas centrales.
Así, se pide al director de Servicios Generales, Javier Alcocer Almaraz, que sean liberados los recursos correspondientes al contrato INAH-CNRMS-CS-008/2021 y se les añada el monto que corresponda por el crédito fiscal sobre la cantidad de las facturas, desde que venció el plazo y hasta que se realice el pago correspondiente. Las faltas no solo son a las cláusulas contractuales, sino al propio artículo 51 de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios, sin dejar de lado el daño patrimonial generado a la compañía. Al interior del INAH también sigue pendiente otra bolsa por aseo, pero para Rapax por cinco meses de retrasos en la integración correcta del respectivo acuerdo.
POR ENGGE I. CHAVARRÍA HERNÁNDEZ
PERIODISTA
@ENGGECHAVARRIA
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