EQUALITY ON DEMAND

Las expectativas

No sé si alguna vez has escuchado el famoso dicho que la vida es simple pero nosotros nos la complicamos

OPINIÓN

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Michelle Ferrari / Equality on demand / Opinión El Heraldo de México
Michelle Ferrari / Equality on demand / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

Me gusta mucho reflexionar sobre esto y me doy cuenta que entre más sencillo es uno y, sobre todo en el mundo material, más feliz puede ser, sin embargo vivimos en un mundo que a la gran mayoría nos han enseñado que para ser feliz hay que tener mucho dinero y muchas cosas. Y en gran parte vivimos para tratar de alcanzar siempre lo siguiente, una vez que tienes lo que pensabas que querías ya no es suficiente.

Me atrevo a decir después de muchos años dedicados a generar mejores lugares para trabajar, me di cuenta que las personas valoraban un buen salario, pero le daban mucha o igual de importancia a estar en un entorno agradable, donde los temas que más valoraban en muchos casos son intangibles y más relacionales, en función de la experiencia vivida. El sentirse parte de algo más que un trabajo, el recibir reconocimiento, el sentirse cuidado, la escucha, el desarrollo.

Ahora que me he enfocado a desarrollar un mundo más inclusivo, vuelvo a comprobar el infinito potencial que tenemos como humanos y lo poco que nos la creemos. ¡Ahí si que falta elevar las expectativas! Mismo que repito a la fuerza femenina. Si nos la creyéramos más, estoy segura que muchas de nosotras lograríamos nuestros sueños más seguido de lo que sucede, y por otro lado, las expectativas que se ponen sobre nosotras o las que nos ponemos de ser super womans también nos pasa muy seguido!

Hay tantas cosas que son relevantes y que dejamos de verlas por perdernos en generar expectativas falsas de lo que creemos que queremos o necesitamos.

Estamos tan poco tiempo en este plano terrenal, que si contáramos los minutos que perdemos por estar pensando babosadas de si tuviera esto o lo otro, o si tuviera más de esto o podría hacer lo otro. Que lo más valioso que es el tiempo no lo aprovechamos de la mejor manera.

Y esto nos debería llevar a reflexionar sobre nuestras expectativas y las de nuestros alrededores. Porque podría asegurar que muchas veces te encuentras viviendo las de alguien más. O algunas que te impones y sin pensarlo van comiéndose la posibilidad de vivir en plenitud.

Hay que pensar detenidamente el por qué y para qué, tener esa claridad, y si nos hace sentido, pues adelante. Sólo procurar estar pendientes de nosotros mismos.

Y cuando digo estar pendientes de nosotros mismos me gustaría compartir un pregunta que considero importante hacernos todos los días, ¿cómo me quiero sentir hoy?, y si le agregamos variaciones como ¿cómo me quiero sentir en mi trabajo?, ¿cómo me quiero sentir en mi vida personal?, ¿cómo me quiero sentir en general?, llevarnos un momento del mundo racional al mundo emocional.

No lo digo yo, lo dicen varios expertos en el tema, hoy más que nunca necesitamos conectarnos a nuestras emociones para poder tener mejor resultados tanto a nivel profesional como personal. Tenemos a autores como Daniel Goleman, que nos hablan de esta inteligencia emocional, la cual si la trabajamos y la dirigimos con fuerza hacia la creación de expectativas más orientadas al mundo emocional, creo que podemos en conjunto revelar un poder humano capaz de cambiar las reglas del juego.

POR MICHELLE FERRARI
michelle.ferrari@greatculturetoinnovate.net
@michferrarib

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