SALTO CUÁNTICO

La paja en el ojo ajeno

¿Qué ves cuando criticas o juzgas lo que sea que no te da sentido?

OPINIÓN

·
Karina Álvarez / Salto Cuántico / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

¿Quien no ha criticado o juzgado algo o alguien alguna vez? Todos.

Pero, ¿por qué criticamos?, primero que cada por nuestros propios prejuicios. Aunque hay de críticas a críticas, en la mayoría de los casos se trata del reflejo que el otro se da de nosotros mismos: es más fácil ver afuera lo que tienes adentro. O como dicen por ahí: lo que te choca, te checa.

Lo cierto es que parte de nuestra educación desde casa, hasta en nuestras escuelas, omiten enseñar la forma correcta de la crítica, ¿cuál sería esa?, pues la de ver sin juzgar, y cómo en la crítica va implícito el juicio, entonces dejemos de criticar.

Criticamos políticas, personas, animales, plantas, sueños, aspiraciones, ideales, a nuestros padres, a nuestros hijos, a los amigos, a Dios y al diablo. Criticamos todo.

¿Y qué pasaría si un día simplemente dejamos de juzgar y comenzamos a comprender, a ver con amor y a hacer lo que nos toca a nosotros?

Criticar al otro es más fácil que cambiar a uno mismo. ¡Claro! Duele menos.

Hay crítica buena y crítica mala que se encamina más al juicio, ninguna es mala en realidad, ¿pero es necesaria?, no siempre, ¿entonces lo es? Aquí viene el debate.

Cuando criticamos a alguien que “amamos”, tenga el título que tenga, es porque según nosotros queremos que sea mejor, que se dé cuenta de sus errores para que los corrija y sea mejor, en todos los sentidos, lo hacemos desde con los atletas hasta con los propios niños.

Entonces ¿podríamos decir que criticamos en favor del beneficio ajeno?, nadie hace nada por nadie, ese es el meollo. Una madre o un padre justifica, por ejemplo, ser golpeador o presionar a sus hijos para que no comentan sus mismos errores, ¿de verdad es por eso o porque simplemente no han podido enmendar los suyos y desquitan su furia, sus traumas y miedos ‘justificadamente’

Cuando alguien nos dice: Lo hago por ti. En verdad debemos preguntarnos si lo hacen por nosotros o por ellos, por ellos para sentirse mejor, para saber que pudieron ‘ayudar’ a alguien, para sentirse útil, para ganarse el cielo.

Nadie hace nada por nadie, y aunque la crítica sea constructiva o destructiva no deja de ser invasiva.

Escuchaba a alguien en Tik Tok que decía: Nunca aceptes una crítica de quien no aceptarías un consejo, y nunca escuches un consejo de quien no ha forjado nada. Es duro, pero cierto.

Si nos basamos en ese pensamiento podríamos decir que la crítica debe aceptarse solo de aquellos a quién creemos nos pueden brindar una perspectiva diferente con base en su experiencia que es admirada por nosotros mismos. No lo sé de cierto, diría Sabines, pero lo supongo.

POR KARINA ÁLVAREZ
TWITTER: @KAFARK84  
CORREO: K.ALVAREZ.ROSAS@GMAIL.COM  
INSTAGRAM. KAFARK

MBL