La donación por parte de Estados Unidos de un millón de dosis de la vacuna Janssen de Johnson y Jonhson anunciada por el gobierno federal para inmunizar a 39 municipios fronterizos con el fin de reactivar la economía y agilizar la reapertura terrestre de la frontera, es una estrategia que ya se estaba aplicando por parte del sector privado asentado en el norte del país.
Desde hace varias semanas, la industria maquiladora vio esta necesidad de inmunizar cuanto antes a su personal para responder a la demanda estadounidense de bienes y servicios, derivado de un crecimiento de 6.4% en el PIB del país vecino, durante el primer trimestre del año.
Por ejemplo, empresas asentadas principalmente en Baja California están vacunando desde hace días a su personal derivado de un acuerdo binacional en el que Estados Unidos permitió que al menos 10 mil trabajadores mexicanos cruzaran la frontera para inmunizarse contra el Covid-19.
El Index que encabeza Luis Manuel Hernández González, con el apoyo de Canacintra, el Consejo de Desarrollo de Tijuana y el Consulado de México en San Diego, se apresuró a negociar la obtención de estas vacunas unidosis de Johnson inmunizando, en una primera etapa, a 1,500 trabajadores por día en una clínica móvil instalada de forma temporal en el UC San Diego Health en San Ysidro, ante la premura de abrir las fronteras y reactivar el comercio terrestre.
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De entrada, este programa arrancó con seis empresas, pero decenas más se encuentran cumplimentando el proceso para poder acceder también a estas vacunas para su personal. A través de esta estrategia se busca inmunizar a 500 mil empleados solo en Tijuana, extendiéndola a otros estados fronterizos.
Ahora, la pregunta entre la iniciativa privada fronteriza es cuándo llegarán estas vacunas anunciadas esta semana por la cancillería que encabeza Marcelo Ebrard, pues urge avanzar en la vacunación del sector productivo fronterizo, estrechamente ligado a la economía estadounidense.
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En Traxión están de fiesta y no sólo porque cumplen 10 años de brindar soluciones a lo largo de toda la cadena de suministro, sino también porque atrajeron los reflectores internacionales al ser incluidos en los listados de MSCI Investable Market Index (IMI), índice que plasma y da seguimiento a la representación de alta, mediana y pequeña capitalización en 23 mercados desarrollados y 27 emergentes.
Y es que la empresa liderada por Aby Lijtszain ha visto crecer como espuma el valor de sus acciones, que pasaron de cotizarse en 17.39 pesos al cierre de 2020, mientras que ya han tocado máximos de 36.92 pesos, así, el incremento es más del doble.
En tanto, su flujo operativo (EBITDA) al tercer trimestre se engrosó 24.7%, con relación al mismo periodo del año previo, al sumar 801 millones de pesos.
POR MILÉN MÉRIDA CASTRO
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