A dos años del anhelado triunfo presidencial de López Obrador, las “benditas redes” sociales no reflejaron los festejos como le hubiese gustado al inquilino de Palacio Nacional.
Más allá de la falta de resultados en seguridad, economía y trabajo, entre otros temas: los festejos fueron opacados por un acto imprudente de la señora Beatriz Gutiérrez Müller con diversos #hashtag que inundaron el twitter todo el día como respuesta, después de que por la mañana conmemorara, en su cuenta, el histórico tsunami morenista de la siguiente forma:
“Hace dos años, los ciudadanos que somos los verdaderos guardianes de la democracia logramos lo impensable: elecciones realmente democráticas”.
Un usuario le respondió:
“¿Cuando atenderá personalmente a los padres de niños con cáncer? Gracias por su amable respuesta”.
Decenas de padres de familia se han manifestado desde el inicio de esta administración porque al desaparecer el Seguro Popular, niños que padecen la enfermedad no han recibido su tratamiento. A pesar de las movilizaciones siguen sin el medicamento.
Ella contestó:
“No soy médico, a lo mejor usted sí. Ande, ayúdelos”.
Las redes enloquecieron con la respuesta de la esposa del presidente. Estaba fresco el caso Chumel Torres, invitado a un foro del Conapred para hablar de racismo, cuando apareció la señora Gutiérrez en son de reclamo a la dependencia por la convocatoria al comediante: “Yo aún sigo esperando una disculpa de Chumel”. Después, ocurrió lo que ya sabemos: el foro de Conapred se canceló, Chumel se disculpó por haber puesto un sobrenombre al hijo menor de Beatriz y el presidente, la titular de la dependencia perdió el trabajo y López Obrador amenazó con desaparecer al Conapred y otros 100 órganos autónomos.
Estas fueron algunas tendencias desde la mañana de ayer: #LaBrujadelPalacio. FirstLady. #ConLosNiñosNO. #NoSoyMedico y #Doctora opacaron nunca dejaron posicionar las felicitaciones a Andrés Manuel por la hazaña ocurrida hace dos años. No sólo eso, también estuvieron arriba los nombres de José Antonio Meade y Ricardo Anaya con diversos mensajes como: “estaríamos mejor con….”
UNA DISCULPA ENTRE DIENTES
“Exijo una disculpa a Chumel Torres por llamar Chocoflan a mi hijo adolescente”, escribió en su cuenta Gutiérrez cuando pasó lo de Chumel.
“Nunca me metería contra un morrito y no quiero tener eso en mi conciencia. Una disculpa a usted y su hijito por el hecho y ojalá todo esté bien. Usted es una mamá y a las mamás se les respeta”.
Ese era el contexto en el que se llegó ayer. Por eso hasta Chumel entró en el debate de los niños con cáncer: “Hasta yo me disculpé”.
Después de una fuerte presión en las redes exigiendo a la esposa de Andrés Manuel disculparse y de más de 10 horas, Gutiérrez tuvo que reaparecer con otro tuit para ofrecer una disculpa, que la verdad no sonó franca sino de dientes para afuera y con declaratoria de guerra de por medio:
“Están muy inquisidores los adversarios de mi esposo, ¡Por algo será! Si mi expresión “No soy médico” ofendió a alguien, ofrezco disculpas. En cuanto a mí, solo expresarles que soy profundamente humana y deseo el bien a todos, ahora y siempre”.
¿Checaron la diferencia de las disculpas?
Uppercut: El que tira los golpes en verdad, Saúl El Canelo Álvarez esta vez fue más ecuánime que ningún otro y antepuso el corazón frente a la desgracia en que nos ha arrebatado la fraternidad las redes sociales para fomentar el odio. El Canelo, el joven fuerte, de récord imbatible, que acaba a golpes a sus rivales arriba del ring, nos mostró la otra cara de la moneda, de lo que puede hacerse desde las cuentas personalizadas: “En que puedo ayudar? Hablen a mi oficina por favor con mucho gusto ayudo (sic)”.
POR ALEJANDRO SÁNCHEZ
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