El anhelo era que cuando en la artisteada escaseara el trabajo, sus restaurantes les dieran para vivir. Sin embargo la realidad por la que están atravesando un sinnúmero de celebridades –que también son restauranteros– es otra, ya que la pandemia de coronavirus les ha privado de toda entrada económica. Un ejemplo es Alexis Ayala que de un día para otro se quedó –debido al obligado paro que han hecho todos los teatros– sin los ingresos que recibía en la obra La homofobia no es cosa de hombres y a través de sus restaurantes de mariscos El Peladito- (cuya mayoría de sucursales han cerrado porque los clientes están encerrados en sus casas).
Situación similar vive Dulce, pues a la cancelación de todos sus shows –en solitario y con las GranDiosas– se suma el cierre hasta nuevo aviso de su casa de comidas ubicada en Mérida, Yucatán. "Pese a que todas las mesas han estado vacías estoy estirando la liga lo más que se puede para no cerrar", me respondió Paúl Stanley a la pregunta de cómo andaba la situación en su pizzería Spiritello.
El panorama tampoco es soleado para la cantante Rosy Arango, pues la fonda de comida oaxaqueña (El buen sazón de mi tierra) de la que es propietaria junto con su madre no ha registrado ventas en los últimos días aún y cuando el menú más caro que ahí se ofrece es de 85 pesos. "No queremos cerrar, ya que de este negocio dependemos 35 personas, pero de seguir las cosas así nos comerá la renta del local y los sueldos de los empleados", me dijo.
A tal magnitud está golpeando el COVID_19 la industria restaurantera que la la actriz colombiana Sara Corrales y el actor argentino German Girotti cerraron sus comedores (ella Vivo, y él La Totoaba) de comida. Y don Juan Carlos Legarreta (padre de Andrea Legarreta), Jorge Burro Van Rankin y Sherlyn (ella apenas el pasado 18 de febrero inauguró la cafetería Isabella) hacen esfuerzos sobrehumanos para mantener en pie sus tabernas y mesones.
CERRADO POR COVID_19
No le quedó de otra y tuvo que cerrar su prestigiado salón de belleza. Sí, forzado por la pandemia de coronavirus, el peluquero Alfredo Palacios y su personal dejaron de dar servicio desde la semana pasada. Él no sabe qué día reabrirá su salón (ubicado en la zona de Polanco). Otra que también cerró su afamado salón de belleza es doña Socorro Castro (madre de Verónica Castro). Ella también desconoce cuándo reabrirá para atender a su apreciable clientela.
NOTICIAS RADIOFÓNICAS
Los que no han faltado a Buenos Días (Radio Centro) son don Héctor Martínez Serrano, don Tomás Mojarro, Mario Méndez Acosta y Adela Castro. Sí, incluso cuando colegas suyos de menor edad han estado trasmitiendo desde su casa por temor a contagiarse de coronavirus–, ellos y ella asisten estoicos a la cabina donde se realiza el veterano programa radiofónico.
SERÉ BREVE
La periodista está viviendo violencia intrafamiliar.
Por hoy es todo. ¡Nos leemos el miércoles venidero!
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POR ALEX KAFFIE
COLUMNAS.ESCENA@HERALDODEMEXICO.COM.MX
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