Los mexicanos nos estamos perdiendo uno de los mayores logros de nuestra economía: observar el desempeño sostenido de los negocios de los mejores empresarios.
Nos encontramos actualmente tan obnubilados por las sandeces de la discusión pública (la rifa de avión es el epítome de esta condición), que hasta las mejores mentes, los académicos más brillantes, y los más sofisticados analistas omiten registrar el otro México que continúa dando resultados: el de las empresas robustas que generan gran valor económico.
Véase lo que ocurrió con Grupo Alfa estos días. La empresa desnudó sus números y el resumen de su estrategia durante 2019 y, a decir de lo revelado, deberíamos tener fiesta nacional porque, a pesar del nulo crecimiento económico del país, la firma encabezada por Álvaro Fernández Garza entregó resultados muy decentes.
Se defiende, lo que beneficia a muchos mexicanos quienes, sin saberlo, están invertidos en esa empresa a través de sus afores y fondos de inversión.
Alfa enfrentó de todo: desde la Fiebre Porcina Africana, hasta la huelga de General Motors, que impactó a su subsidiaria de autopartes Nemak. Pero supo responder consecuentemente: conforme a los tiempos, fortaleció su posición en la industria de reciclaje de PET, y elevó a 60 por ciento su capacidad de reciclado. La empresa adquirió una planta de reciclaje en Estados Unidos y, antes de que cerrara 2019, anunció la adquisición de otra más en Reino Unido.
Si se habla de innovación en México, se tiene que poner a Grupo Alfa en los primeros 10 lugares: su subsidiaria de alimentos, Sigma, lanzó más de 270 productos al mercado el año pasado y tiene en su “pipeline” otros 740.
Difícilmente otra corporación mexicana o latinoamericana le puede igualar. Esta subsidiaria también dijo que tendrá un fuerte enfoque en snacks de proteína, lo que seguramente le dará ventaja en un entorno donde los carbohidratos y las grasas (a veces con razón, y a veces sin ella), han sido satanizados.
No nos confundamos sobre lo realmente importante en el escenario de negocios mexicano. Alfa generó ventas anuales por más de 17 mil 500 millones de dolares, de los cuales casi 2 mil 300 fueron flujo de operación.
En ambos casos estas cifras representaron disminuciones sensibles respecto a 2018.
Es lo que no agrada a los analistas bursátiles. Pero si vemos el bosque completo, con el contexto del país y con la 4T incluidos, no debemos sino apoyarle y celebrar que está fortaleciendo su estrategia.
El propio Álvaro lo dijo: Alpek estará enfocada en el reciclaje de PET; Sigma profundizará sus innovaciones y Nemak capitalizará sobre los contratos recientemente firmados.
CEMEX
La cementera que encabeza Fernando A. González prevé un crecimiento entre 0 y 2 por ciento para 2020. No, los efectos de la 4T no se disipan rápidamente…
[nota_relacionada id=861914]
POR CARLOS MOTA
MOTACARLOS100@GMAIL.COM
WHATSAPP 56-1164-9060
abr